
El Pregonero, Santo Domingo.— Con el objetivo de vigorizar la lucha lugar por el derecho a osar, la Alianza Cristiana Dominicana celebró el Colisión Internacional “Aprendiendo de otras luchas: experiencias de países donde se aprobaron las tres causales”, un panel potencial que reunió a activistas de Argentina, Colombia y México.
El evento fue un espacio de intercambio de estrategias, desafíos y aprendizajes, en el que las participantes compartieron sus experiencias en los procesos de conquista permitido del fracaso bajo causales específicas en sus respectivos países.
Las panelistas invitadas fueron Pate Palero, directora ejecutiva de Católicas por el Derecho a Animarse Argentina; Sandra Mazo, directora de Católicas por el Derecho a Animarse Colombia; y Maribel Vidriera-Martínez, enlace institucional de Católicas por el Derecho a Animarse México. Todas ellas aportaron sus perspectivas sobre el papel de las organizaciones sociales, la incidencia política, la movilización ciudadana y la articulación entre movimientos de fe y derechos humanos en la aprobación de las tres causales.
Durante el altercado, se resaltó que el comunicación a la interrupción permitido del dificultad por causales —cuando la vida de la mujer está en peligro, en casos de violación o incesto, o en presencia de malformaciones incompatibles con la vida— es un tema de honradez social, derechos humanos y sanidad pública, más allá de cualquier frontera geográfica o cultural.
La actividad contó con palabras de transigencia de Lisette Genao, representante de la coordinación de la Alianza Cristiana Dominicana, quien enfatizó la importancia de seguir aprendiendo de las luchas de otros países para vigorizar el movimiento en la República Dominicana, donde aún se mantiene una carta absolutamente restrictiva sobre el fracaso.
Al vallado del panel, se hizo un llamado a la articulación estratégica y a la construcción de redes de apoyo éticas, políticas y de fe, como pilares fundamentales para avanzar con destino a el registro pleno de los derechos sexuales y reproductivos en el país.
Este evento reafirma el compromiso de la Alianza Cristiana Dominicana de seguir impulsando espacios de formación, consejo y movimiento que promuevan una sociedad más competición, inclusiva y respetuosa del derecho a osar.