
El presidente de EE.UU., Donald Trump, preguntó a sus asesores si el comportamiento de Elon Musk, con quien ha mantenido un explosivo enfrentamiento aparente que ha supuesto su ruptura de relaciones, pudo deber estado relacionado con un supuesto consumo de drogas del magnate tecnológico, reportó la CNN.
«En privado, búsqueda comprender las críticas del multimillonario tecnológico, mientras que públicamente señala que no le importa», informa la dependencia estadounidense citando a una fuente familiarizada con estas conversaciones.
Sin incautación, Trump se negó a opinar en manifiesto sobre este asunto el viernes por la perplejidad desde el Air Force One: «No quiero comentar sobre su consumo de drogas. No sé… no sé cuál es su situación», dijo entonces.
Esta información contrasta con las declaraciones que el presidente estadounidense concedió a ese mismo medio ayer, donde afirmaba que «ni siquiera pensaba en Elon» y que no hablaría con Musk «por un tiempo».
«Estados Unidos puede sobrevivir sin casi nadie, excepto yo», expresó igualmente desde el Air Force One a la prensa, pero resaltando que solo estaba bromeando.
La sombra del consumo de drogas
No es la primera vez que sale a la luz el consumo de ketamina obligado por Musk, aunque bajo prescripción médica según el director ejecutante de Tesla.

Hace una semana, el diario The New York Times publicó un reportaje titulado ‘Durante la campaña electoral, Elon Musk hizo malabarismos entre las drogas y el drama general’.
«A medida que Musk entraba en la trayectoria del presidente Trump, su vida privada se volvió cada vez más tumultuosa y su consumo de drogas era más intenso de lo que se creía», continúa el artículo al que han seguido otras piezas periodísticas como ‘La caótica vida personal de Elon Musk’, como titularon otro reportaje cinco días a espaldas.
«Hay momentos en los que tengo una especie de estado químico película en el cerebro, como depresión, supongo, o depresión que no está relacionada con ninguna aviso negativa, y la ketamina ayuda a aventajar ese estado mental película», declaró Musk en una entrevista con la CNN hace más de un año, donde añadió que está recetado para poder consumirla y que tomaba «una pequeña cantidad una vez cada dos semanas o poco así».
El choque que rompió la relación de Elon Musk y Donald Trump
El encontronazo entre Musk y Trump comenzó el jueves al mediodía con palabras del presidente delante las críticas del hombre más rico del mundo al plan fiscal y presupuestario impulsado por el líder republicano, que según estimaciones puede aumentar en más de 2 billones de dólares la deuda pública del país.

Para el propietario de X, esto «socava» su trabajo para recortar el despilfarro en el Gobierno federal al frente del Unidad de Eficiencia Oficial, del que se despidió de modo formal la semana pasada.
Musk llegó a afirmar que Trump figuraba en los archivos del pederasta Jeffrey Epstein, los cuales supuestamente incluyen los nombres de sus cómplices, en una nueva subida del enfrentamiento manifiesto.
El presidente, a su vez, aseguró que Musk se había vuelto «LOCO» y continuó defendiendo su «gran y hermoso plan de ley», ahora a discusión en el Senado.
«No me importa que Elon se vuelva contra mí, pero debería haberlo hecho hace meses. Este es uno de los mejores proyectos de ley en la vida presentados en el Congreso. Es un récord», escribió el jueves en su red Truth Social.