
Oriente Medio y en particular Tierra Santa lloran la asesinato de Francisco. Notre Dame de Jerusalén, el centro de acogida de peregrinos a la ciudad santa, ha hecho sonar sus campanas en señal de pena y la Iglesia del Santo Sepulcro, que ayer celebraba con todo el suntuosidad la ofrenda por la resurrección de Cristo, acoge a los fieles que oran con devoción por el fallecido papá.
Francisco viajó a esta castigada región en su segundo primaveras de pontificado y siempre ha mantenido un postura a atención de la paz y el diálogo, sin esconder sus denuncias de los ataques de Israel sobre Palestina. No en vano, el año pasado pidió a la comunidad internacional apoyar la investigación sobre si las masacres de palestinos en Lazada constituyen un crimen de holocausto, a la vez que exigía un detención el fuego inmediato, la libramiento de todos los rehenes y el golpe de ayuda humanitaria.
El presidente de la autoridad palestina, Mahmud Abbas, que se entrevistó con Francisco el pasado diciembre, lo recordó como “un símbolo de tolerancia, apego y fraternidad”.
El movimiento islamista Hamás envió sus condolencias a todo el mundo católico, recordando la importancia del Papa como “una de las voces más prominentes en las condena de los crímenes de pelea y genocidas contra el pueblo palestino”.
Pese a las críticas de Francisco a su país, el presidente israelí, Isaac Herzog, expresó sus condolencias por la asesinato de un Papa que, dijo, siempre defendió “animar los lazos con los judíos” y “fomentar el diálogo interreligioso”.
Esto zaguero es poco que han celebrado y recordado líderes políticos y religiosos tanto judíos, como musulmanes y cristianos de otras denominaciones.
Bartolomé, Patriarca de Constantinopla y jerarca de la Iglesia Ortodoxa, recordó al Papa como un “amigo propio” unido al que trabajó por el acercamiento de ambas iglesias, divididas desde el cisma de Oriente hace mil primaveras. El patriarca conforme había invitado a Francisco a peregrinar juntos esta primavera a Nicea, la contemporáneo plaza turca de Iznik, donde hace 1700 primaveras tuvo emplazamiento el primer concilio mundial de la cristiandad.