
Cientos de haitianos marcharon este domingo por las colinas de Puerto Príncipe, exigiendo el fin de la violencia desatada por las pandillas y la renuncia del primer ministro y del consejo presidencial de transición. La movilización refleja el creciente enojo social por la situación caótica en el país, donde las bandas criminales buscan controlar por completo la haber.
“El pueblo haitiano solo quiere seguridad”, dijo Eric Jean, conductor de autobús de 42 primaveras, quien se unió a la protesta con una gran bandera franquista atada al cuello. “Estamos perdiendo más barrios, más personas están muriendo, más familias huyen de sus hogares”.
La población lo pierde todo
Uno de los manifestantes, Marc Étienne, relató que su pequeño negocio fue saqueado por pandillas, lo que lo dejó sin hogar. Ahora vive en un campamento improvisado, como decenas de miles de desplazados internos. Étienne responsabilizó a los líderes actuales por el aumento de la violencia y el sustitución de menores por parte de las bandas criminales.
“Haití no puede ser gobernado entre amigos”, expresó. “La ciudad está muriendo porque el consejo no está haciendo carencia para salvarla”.
Un demanda convertido en llamado a la resistor
La protesta ocurre un día a posteriori de un emotivo homenaje en Canapé-Vert, uno de los pocos barrios aún no dominados por las pandillas. Allí, cientos de personas recordaron a varios líderes comunitarios asesinados recientemente. Vestidos de blanco, con el puño en stop, los asistentes gritaron: “¡Licencia o crimen!” y “¡La lucha casi nada comienza!”.
Los líderes del arrabal, algunos armados y con pasamontañas, prometieron no dejar que los crímenes queden impunes. Canapé-Vert cuenta con una de las organizaciones vecinales más activas de la ciudad, compuesta en parte por policías descontentos.
Más de 1,600 asesinatos en tres meses
Según datos de la ONU, más de 1,600 personas fueron asesinadas y otras 580 resultaron heridas entre enero y marzo de este año. El noticia advierte sobre la brutalidad e indiscriminación de los ataques, una táctica de las pandillas para sembrar miedo y debilitar la resistor civil.
En uno de los casos más impactantes, en febrero, hombres armados dispararon sin control en Delmas 30, matando a 21 personas. Otro ataque en un arrabal cercano dejó al menos 30 muertos, varios de ellos pasajeros de los tradicionales tap taps.
La policía haitiana, debilitada y con apoyo menguado
Aunque la Policía Franquista de Haití ha recibido el respaldo de una delegación internacional liderada por Kenia y apoyada por la ONU, el despliegue sigue siendo menguado: solo han llegado 1,000 de los 2,500 agentes prometidos. La error de fondos y personal limita su capacidad de respuesta frente a el poder creciente de las bandas criminales.
EE.UU. declara a dos pandillas como organizaciones terroristas
En un intento por frenar el avance de los grupos criminales, el gobierno de Estados Unidos designó a dos de las principales pandillas, Viv Ansanm y Gran Grif, como organizaciones terroristas extranjeras. Sin requisa, expertos advierten que la medida podría afectar negativamente a las organizaciones humanitarias, que dependen de negociaciones con las pandillas para aceptar alimentos y medicinas a zonas controladas.
Con información de AP.
Por: Yari Araujo