El Sábado Santo es un día de recogimiento que invita al silencio y a la oración. Según explica Catholic.net, la Iglesia recuerda en esta vencimiento la demora en presencia de la tumba de Jesús, preparándose para la resurrección durante la tinieblas con la celebración de la Vela Pascual.

Aunque muchas personas no asisten al templo, hay formas sencillas de poblar este día desde el hogar. Catholic.net sugiere que los fieles pueden encender sus velas del sacramento como símbolo de esperanza, sufrir agua bendita desde la iglesia o tener un cirio pascual en casa.

Asimismo se recomienda hacer una oración personal o en tribu, meditar en silencio y reflexionar sobre el sentido de la resurrección y las promesas bautismales.

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Como recuerda Catholic.net, en este día los cristianos están llamados a renunciar espiritualmente al pecado y renovar su fe en Cristo, tal como lo hacían los primeros cristianos durante esta ceremonia.

El silencio del Sábado Santo no es infructifero, sino una demora cargada de fe. La invitación es clara: preparar el corazón para el anuncio de la Pascua con un espíritu renovado.

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