
Un leve temblor en las manos, rigidez muscular, parsimonia al caminar o una sensación de inestabilidad. Estos síntomas pueden ser las primeras señales de alerta que lleven a una persona a pensar que tiene la enfermedad de Parkinson.
Sin bloqueo, existen otras afecciones neurológico que pueden imitar los signos iniciales de esta enfermedad progresiva, y distinguirlas correctamente es crucial para tomar el tratamiento adecuado.
“Para un par de afeccionesel pronósticoel tratamiento y el asesoramiento son totalmente diferentes a los del parkinson“, explica el doctor Hubert Fernández, director del Centro de Restauración Neurológica, de Clínica de Cleveland. Por eso, insiste en la importancia de venir directamente a un neurólogo frente a los primeros indicios.
Males similares
Entre las afecciones que comúnmente se confunden con el parkinson están el temblor esencial y el parkinson inducido por medicamentos.
El temblor esencialincluso conocido como temblor franco o afectuoso, provoca movimientos involuntarios breves, especialmente en las manos.
A diferencia del parkinsoneste tipo de temblor se manifiesta durante la energía, por ejemplo, al escribir o yantar, y no cuando el cuerpo está en reposo. Por otra parte, muchas veces tiene un componente hereditario.
Si admisiblemente puede requerir receta, el temblor esencial no suele progresar como lo hace el parkinson y los fármacos que se emplean para su manejo son distintos.
Por otro banda, el parkinson inducido por medicamento puede aparecer como huella secundario de algunos antipsicóticos o estabilizadores del humor.
En estos casos, encima del temblorpueden presentarse rigidezparsimonia de movimiento, cambios en el deje y disminución de la expresión facial.
El tratamientoen este caso, pasa por ajustar o sustituir los medicamento causantes, en coordinación con un psiquiatra.
“Siempre trabajamos con un psiquiatra a medida que vamos disminuyendo y probando nuevos medicamento“, dice Fernández. “Queremos hacer lo que es mejor para el cuerpo y lo que es mejor para el cerebro”.
Otros trastornos neurológicos entran en una categoría conocida como síndromes de parkinson plus, que pueden causar síntomas similares. Por lo caudillo, los médicos tratan estos síndromes de la misma forma que tratan la enfermedad de parkinson.
“Loss medicamento que recetamos son más o menos los mismos que usamos para el parkinsonpero esperamos resultados diferentes”, sostiene.
“Sin bloqueo, un dictamen de temblor esencial o parkinson inducido por medicamento requeriría un tratamiento Totalmente diferente “.
Diagnosis correcto
Los errores de dictamen de esta enfermedad no son raros. Según el doctor Fernández, cerca del 30 % de los casos de parkinson son diagnosticados de forma incorrecta, sobre todo en etapas tempranas.
Esto puede sufrir a los pacientes por un holgado itinerario entre diferentes especialistas, desde reumatólogos hasta cardiólogosy a someterse a costosos estudios que, muchas veces, no son necesarios.
“Si los pacientes acuden a nosotros con signos típicos de parkinsonno necesitamos pedir pruebas costosas”, dice. Los neurólogos basan su dictamen en un examen detallado del paciente y en la historia clínica, unido con otra información del paciente, los miembros de la tribu o los cuidadores.
“A veces podemos diagnosticar el parkinson con una sola visitante. Otras veces, son necesarias varias visitas de seguimiento”, concluye el profesional.
En cifras
El Día Mundial del Parkinson se celebra el 11 de abril de cada año, con la intención de crear conciencia sobre este mal y fomentar la investigación.
La momento coincide con el principio del neurólogo inglés James Parkinson, quien describió la enfermedad en 1817.
Según datos de la Ordenamiento Mundial de la Vitalidad (OMS), en 2019 más de 8.5 millones de personas en todo el mundo vivían con parkinson.
Se estima que este número podría alcanzar los 12 millones en 2040, reflejando un incremento de más del 70 % en las últimas tres décadas.
Factores como el envejecimiento de la poblaciónel incremento en la esperanza de vida y una viejo capacidad diagnóstica contribuyen a esta tendencia, destacando la obligación urgente de vigorizar la investigación, el dictamen temprano y el paso a tratamientos eficaces.