El autor es diputado.

Lo que alguna vez fue el cine El Portal y que más tarde se convirtió en la emblemática discoteca Jet Set, en Santo Domingo, terminó siendo decorado de una tragedia que ha dejado a toda la nación en estado de shock. El desplome total de su techo durante un evento ha provocado no solo víctimas mortales y heridos, sino asimismo profunda indignación social y una urgente menester de respuestas claras.

La destrucción de la edificación fue inmediata y total, un colapso que, según testigos y artistas presentes, ocurrió sin advertencia previa. Algunos artistas y personas que frecuentaban el ocasión, incluso han reportado acontecer pasado trozos de cemento caer del techo en otras oportunidades. Este tipo de comportamiento estructural resulta intranquilizante, ya que las edificaciones están, en principio, diseñadas para resistir cargas y deformaciones, mostrando signos visibles antiguamente de cualquier colapso.

La respuesta del presidente Luis Abinader ha sido oportuna. Ahora proporcionadamente, la magnitud del derrumbe exige que se inicie una investigación técnica rigurosa y profunda, con la décimo de ingenieros estructurales, peritos forenses, expertos en mantenimiento de edificaciones, y autoridades independientes.

No se tráfico solamente de asimilar qué ocurrió, sino de esclarecer las posibles causas de la tragedia y determinar si hubo negligencia en los estándares de diseño, supervisión o mantenimiento del ocasión.

La ciudadanía exige transparencia. Debe buscarse a los responsables por la negligencia de esta desgracia y admitir las consecuencias hasta las últimas instancias legales, sin importar quiénes estén involucrados. El caso de Jet Set no puede permanecer en el olvido ni sumarse a la larga registro de tragedias sin conciencia.

Por otra parte del noticia oficial que se paciencia por parte de los bomberos y las autoridades municipales, es indispensable un noticia forense de la estructura que analice el historial de mantenimiento del edificio, posibles modificaciones irregulares, y si se cumplieron las normativas nacionales de seguridad estructural.

Lo ocurrido en Jet Set es una dolorosa advertencia. Una emplazamiento de atención para revisar no solo esa edificación, sino asimismo muchas otras de uso sabido que podrían estar en condiciones similares. La vida de los ciudadanos no puede permanecer en manos de la improvisación ni de la negligencia.

Necesitamos respuestas. Necesitamos conciencia. Y la necesitamos ahora.

Jpm-am