
A casi un año de su conformación, el Consejo de Transición en Haití —integrado por nueve miembros— no ha acabado estabilizar la nación ni convocar elecciones presidenciales, mientras el país continúa sumido en una profunda crisis política, social y de seguridad.
La violencia sigue escalando. Grupos criminales controlan vastas zonas del comarca haitiano, particularmente en la haber, Puerto Príncipe, donde se estima que dominan el 90 % del campo de acción. Estas bandas armadas han sembrado el terror entre la población, cometiendo actos de tortura, desplazamientos forzados y provocando una migración masiva en torno a países como Jamaica, Bahamas, Estados Unidos, Panamá y República Dominicana.
La violencia y el control de bandas criminales aumentan en Puerto Príncipe
El Consejo de Transición fue establecido el 25 de abril de 2024, tras la renuncia del entonces primer ministro Ariel Henry. Sin confiscación, los esfuerzos por restablecer el orden han resultado insuficientes, y la situación se ha agravado desde el crimen del presidente Jovenel Moïse, ocurrido en julio de 2021, hecho que dejó al país en un malogrado institucional sin celebración de elecciones desde entonces.
Te recomendamos percibir: Henry oficializa su renuncia en víspera de la instalación del Consejo de Transición
La Ordenamiento Internacional para las Migraciones (OIM) alertó en febrero que, solo en el posterior mes, cerca de 60,000 personas se han pasado obligadas a huir de sus hogares correcto a la violencia extrema. “Nunca habíamos pasado a tanta gentío desplazarse en tan poco tiempo”, expresó Grégoire Goodstein, patriarca de la OIM en Haití.
En un intento por contener la situación, el 25 de junio de 2024 arribó a Haití el primer contingente de una fuerza internacional liderada por Kenia, compuesta por 2,500 agentes. No obstante, su presencia aún no ha acabado revertir el control que mantienen los grupos armados.
Fuerza internacional liderada por Kenia llega sin revertir el caos existente
Esta cometido internacional fue solicitada inicialmente por Ariel Henry en octubre de 2022, y reiterada en presencia de la ONU en septiembre de 2023. Sin confiscación, fue al punto que en octubre de ese mismo año cuando el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó su despliegue, con Kenia asumiendo la responsabilidad del liderazgo y comprometiendo un total de 1,000 efectivos para apoyar a la Policía Doméstico de Haití en la restauración del orden conocido.
A pesar de estos esfuerzos, la crisis haitiana continúa profundizándose, sin señales claras de opción en el corto plazo.