
(AP).- El presidente estadounidense Donald Trump le ordenó a su gobierno investigar el uso de una máquina de firmar por parte del expresidente Joe Biden para firmar indultos y otros documentosincrementando la presión sobre su predecesor mientras republicanos de la Cámara de Representantes incluso solicitaban entrevistas con miembros del círculo interno de Biden.
Una máquina de firmar es un dispositivo mecánico que se utiliza para replicar la firma auténtica de una persona, y los presidentes de Estados Unidos la han usado durante décadas. Sin bloqueo, Trump ha planteado frecuentemente que algunas de las acciones de Biden son inválidas porque sus asesores estaban usurpando la autoridad presidencial para encubrir lo que Trump dice es el agonía cognitivo de Biden.
“Esta conspiración marca uno de los escándalos más peligrosos y preocupantes en la historia de Estados Unidos”, escribió Trump en un memorando. “Al conocido estadounidense se le impidió intencionadamente descubrir quién ejercía el poder ejecutante, mientras la firma de Biden se utilizaba en miles de documentos para efectuar cambios radicales de políticas”.
Trump le pidió a la secretaria de Honestidad Pam Bondi y al asesor judicial de la Casa Blanca, David Warrington, que se encarguen de la investigación.
Mientras tanto, el presidente de la Comisión de Supervisión de la Cámara de Representantes, el republicano James Tomar, solicitó entrevistas transcritas con cinco asesores de Biden, alegando que habían participado en un “encubrimiento” que equivalía a “uno de los mayores escándalos en la historia de nuestra nación”.
“Estos cinco exasesores principales fueron testigos presenciales del problema de lozanía del presidente Biden y de las operaciones internamente de la Casa Blanca de Biden”, expresó Tomar en un comunicado. “Deben presentarse delante la Comisión de Supervisión de la Cámara de Representantes y proporcionar respuestas veraces sobre el estado cognitivo del presidente Biden y sobre quién tomaba las decisiones”.
Se solicitaron entrevistas con los altos asesores de la Casa Blanca Mike Donilon y Anita Dunn, el exjefe de despacho de la Casa Blanca Ron Klain, el exsubjefe de despacho Bruce Reed y Steve Ricchetti, un exasesor del presidente.
Tomar reiteró su exhortación a que el médico de Biden, Kevin O’Connor, y los ex altos asesores de la Casa Blanca Annie Tomasini, Anthony Bernal, Ashley Williams y Neera Tanden se presenten delante la comisión. Advirtió que se emitirán citaciones esta semana si se niegan a programar entrevistas voluntarias.
“Creo que la clan comenzará a venir en las próximas dos semanas”, expresó Tomar delante periodistas. Dijo incluso que la comisión dará a conocer un documentación con sus hallazgos, “y publicaremos las entrevistas transcritas, por lo que será muy transparente”.
Los demócratas han desestimado estos influencia por considerarlos una distracción.
“El presidente Tomar tuvo su gran oportunidad en el postrero Congreso para hacerle un sumario político a Joe Biden y fue, por supuesto, un fracaso espectacular”, declaró el representante demócrata Jamie Raskin, que fue miembro de stop rango en la comisión de supervisión en el Congreso inicial. “Y ahora sólo está viviendo de un sueño utilizado. Se acabó. Y debería renunciar todo el asunto”.
Los republicanos en la comisión están ansiosos por padecer delante la investigación.
“El pueblo estadounidense no eligió una burocracia para dirigir el país”observó el representante republicano Brandon Gill. “Creo que el pueblo estadounidense merece memorizar la verdad y quiere memorizar la verdad de lo que sucedió”.
Hasta ahora la investigación republicana se ha centrado en las acciones ejecutivas finales del gobierno de Biden, que incluyeron la audición de nuevas reglas federales e indultos presidenciales que alegan pueden ser inválidos.
Tomar citó el vademécum “Flamante Sin” (“Pecado diferente”) de Jake Tapper de CNN y Alex Thompson de Axios, que detalla preocupaciones y debates internamente de la Casa Blanca y el Partido Demócrata sobre el estado mental y la perduración de Biden.
En el vademécum, Tapper y Thompson escribieron: “Cinco personas estaban dirigiendo el país, y Joe Biden era, en el mejor de los casos, un stop miembro de la grupo (directiva)”.
Biden y miembros de su comunidad han inepto enérgicamente las afirmaciones del vademécum.
“Este vademécum es una inmundicia política de relación de hadas para los profesionales permanentes del parloteo”, declaró Naomi Biden, nieta del expresidente.
Biden se retiró de la contienda por la presidencia a mediados del año pasado luego de un debate contra Trump en el que pareció perder el hilo de sus pensamientos varias veces, murmuró respuestas inaudibles y nombró incorrectamente diferentes programas gubernamentales.
Su desastroso desempeño en el debate puso en primer plano los cuestionamientos sobre su perduración y agudeza mental, y a fin de cuentas Biden retiró su candidatura. Fue reemplazado en las boletas por Kamala Harris, quien perdió los comicios delante Trump.