En las calles de Guanumala vida transcurre igual que siempre: hay movimiento, pero no hay novedad. Es un Viernes Santo sin viacrucis y sin gagáeste posterior, una manifestación religiosa, sincretista y cultural típica de los bateyes cañeros que se presenta para esta época, sobre todo en la región Este del país

Desde la casa de Morenacomo la llaman los vecinosllegaron a salir grupos de personas entonando canciones asociadas a esa tradición. Pero eso era en otros tiempos, asegura ella. Los desteñidos retazos de papel vejiga que cuelgan del techo de su colmado, frente a su casa, evocan otros tiempos.

“Aquí lo hacían, pero el que lo hacía se murió, hace mucho tiempo. Lo que nosotros hacíamos prácticamente no es gagáporque el gagá tiene una orquestina: tiene reinas, tiene reyes… lo de nosotros era un cancito y lo prohibieron, y no se puede tocar, porque no podemos romper la ley”, explicó con una ojeada desconfiada y un cigarro en las manos.

A pocos metros de su casa, una patrulla de la Policía se para firme sobre un bar cerrado. Un hombre de la Defensa Civil echa un ojo a las aguas enlodadas del río Guanumafrente a un aviso que dice “baños cerrado”.

El silencio prima en los poblados donde los residentes niegan con la comienzo y señalan otros poblados cercanos en los que pueda hallarse algún avistamiento de esta celebración como en Batey Yagua, El Vigía, Los Jovillos y Don Juan.

“¿LOS buscan a chivatearlos?”, pregunta un hombre entre risas.

Solidaridad por la tragedia

Algunos grupos decidieron derogar sus presentaciones en respeto al duelo doméstico que ha generado el derrumbe del techo del Jet Set, que causó la crimen de 232 personas e hirió a 189.

La Asociación Dominicana de Gagá (Dirección) emitió un comunicado en el que informó a todos sus miembros, seguidores y a la comunidad en genérico, la suspensión de esta celebración durante la presente Semana Santa por la tragedia en el Jet Set.

“Como fieles exponentes de nuestra civilización y ciudadanos comprometidos con el bienestar de nuestra sociedad, Dirección se une al distinguir de dolor y consternación que embarga a la nación. Entendemos que este es un momento de recogimiento, advertencia y respeto alrededor de las víctimas y sus familiares. Por lo tanto, exhortamos a todos nuestros miembros a acatar de modo plena esta osadía”, puntualizó el cofradía en un comunicado.

A este llamado se unieron otros gremios, como la Corporación Municipal de Don Juan y la Asococioción de Mujeres y Jóvenes del Batey Los Jovillosquienes informaron de la paralización de sus actividades en solidaridad con el duelo doméstico.

Las presentaciones asimismo se han cancelado en San Pedro de Macorís y La Romanados provincias en las que el gagá tiene una importante presencia en la civilización de sus bateyes, según músicos y artistas consultados.

La tradición

El investigador, sociólogo y folclorista Dagoberto Tejeda define el gagá como una manifestación sincretista de la civilización africana, europea, dominicana y haitiana que se ha convertido, a lo espléndido de los abriles, en un culto religioso.

Es una expresión mágico-religiosa que, por otra parte de su dimensión espiritual, refleja las relaciones sociales marcadas por la desigualdad y la convivencia entre los dominicanos, los dominicanos de ascendencia haitiana y los haitianos que viven en los bateyes azucareros.

La festividad –cuyo origen es difícil de determinar pero ya existían manifestaciones similares desde el siglo XVIII, según investigadores– se celebra a partir del mes de febrero, cobrando una veterano presencia en la Semana Santasobre todo desde el Jueves Santo hasta el Domingo Santo.