
El secretario caudillo de la Ordenamiento de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, afirmó este martes que “ningún liga ni gobierno puede detener la revolución de la energía verde”haciendo mención escasamente implícita al Gobierno estadounidense de Donald Trump, y a su retirada de los acuerdos climáticos de París y envite de nuevo por los combustibles fósiles.
Guterres realizó esta testimonio tras organizar con el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, una reunión potencial para preparar la próxima COP30 en Belem (Brasil) en noviembre, reunión que contó con diecisiete mandatarios, entre ellos el de China, la Unión Europea, Colombia, Pimiento y España, entre otros países.
Asimismo, que las energías renovables son más baratas, crean empleos, impulsan el crecimiento financiero y permiten avanzar alrededor de la soberanía energética, añadiendo que han propiciado “un bum del sector, creando empleos e impulsando la competitividad y el crecimiento en el mundo sereno”.
Dijo que las energías renovables “ofrecen el camino más seguro alrededor de la soberanía energética y la seguridad, y propician zanjar con la dependencia de las importaciones de combustibles fósiles, volátiles y caros”.
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Aunque fue preguntado específicamente sobre si tenía algún mensaje expreso para Trump, Guterres -que no acento con el presidente estadounidense desde hace al menos cinco meses- optó por la diplomacia y aludió al dinámico sector privado estadounidense.
“Estados Unidos es una heredad de mercado, no es el gobierno el que determina el barriguita de lo que se produce con combustibles fósiles o con energía renovable, y vemos en Estados Unidos que el costo de las renovables es pequeño que el de las fósiles, como vemos un sector privado muy dinámico y comprometido con el mismo objetivo”, refirió.
Por otro flanco, fue llamativa su mención positiva a China, la otra gran potencia económica y por ende contaminante: Guterres explicó que el presidente Xi Jinping había anunciado en la reunión de hoy (a puerta cerrada) que sus contribuciones nacionales en la lucha contra el cambio climático cubrirán “todos los sectores económicos y todos los gases invernaderos”, y aclaró que es la primera vez que China deja claro este aspecto.
Guterres consideró que las dos acciones prioritarias a nivel mundial en el ámbito climático son la definición clara de los planes nacionales de transición energética antaño de la COP30, más un apoyo decidido de los países ricos a los más vulnerables (África y los estados insulares) para financiar los 1.300 billones de dólares que van a escasear hasta 2035 para sus planes de transición.
El político portugués lamentó que África en su conjunto, con un 60 % de las mejores fuentes solares del mundo, solo tiene instalada un 1,5 % de capacidad de vivientes solar, y recibe solo un 2 % de la inversión integral en renovables.