Santo Domingo, 29 abr (EFE).- La República Dominicana deportó este año a 114,884 haitianos, de acuerdo con cifras ofrecidas este martes por la Dirección Normal de Migración (DGM).

Desde 2016, el país deportó 1,177,813 haitianos indocumentados, de los que 114,884 corresponden a este año, según lo expuesto por el responsable de la DGM, el vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester.

El suspensión cargo marcial se refirió en esos términos al impartir la conferencia La efectividad migratoria de la República Dominicana y la República de Haití, en la que subrayó, adicionalmente, que la migración haitiana sigue siendo el veterano desafío para el país, de acuerdo a una nota de su oficina enviada este martes.

CRISIS AUMENTA EL FLUJO DE HAITIANOS HACIA DOMINICANA

La situación del vecino Haití, sumido desde hace abriles en una severa crisis, está provocando flujos de personas en dirección a el división franquista, «imponiendo presiones crecientes sobre la educación, la vigor y el empleo informal», añadió en el ámbito de un foro sobre las migraciones organizado por el Parlamento Centroamericano (Parlacen) y la Comisión de Relaciones Exteriores y Migración del Senado de la República.

En presencia de este panorama, «hay que defender el interés franquista, respetando los derechos de las personas y la dignidad humana», dijo.

No obstante, Lee Ballester aclaró que no todos los ciudadanos haitianos que viven en República Dominicana están indocumentados ya que, subrayó, en el ámbito del Plan Doméstico de Regularización de Extranjeros de 2014 un total de 206.073 haitianos solicitaron regularizar su status y mantienen actualizados sus permisos de residencia y trabajo emitidos por la DGM.

RD CONTINUARA DEPORTACIONES DE INDOCUMENTADOS

El presidente del país, Luis Abinader, afirmó el lunes que su país continuará con su política de deportación de haitianos indocumentados, criticada por las Naciones Unidas y Gracia Internacional, y consideró que el país enfrenta «retos sin precedentes» oportuno a que en Haití se produce «una situación sin precedentes».

A principios de abril, Abinader dio a conocer una serie de 15 medidas para hacer frente a la inmigración haitiana, entre estas un protocolo polémico para exigir identificación y prueba domiciliaria a los haitianos que acuden a los hospitales, lo que ha derivado en la deportación de decenas de parturientas y embarazadas.

El jueves pasado, el secretario caudillo de la ONU, António Guterres, criticó la implantación del protocolo de comprobación migratoria en los hospitales dominicanos, poco que solo en el primer día de implantación derivó en la detención de 87 pacientes haitianas embarazadas y próximas a dar a luz.

Posición de la gracia internacional

Un día antaño, Gracia Internacional (AI) pidió al Gobierno dominicano poner fin «de inmediato» a las expulsiones colectivas de haitianos y derogar el protocolo que vincula el acercamiento a servicios de vigor con la deportación, iniciado el lunes como parte de las medidas adoptadas por el país frente a la inmigración irregular desde Haití.

Abinader respondió, un día luego, que la estructura internacional lo que debía hacer era ir a trabajar en Haití (…) «que vayan a ocuparse de la situación de los derechos humanos en Haití, que no abandonen Haití. Y a la comunidad internacional además que lo haga».