
La razón por la que Biden no rescindió estos contratos, como Trump afirma que proporcionadamente podría tener, es porque SpaceX generalmente ha proporcionado servicios espaciales al gobierno de los EE. UU. A un costo más bajo y en una camino de tiempo más rápida que sus competidores. Si la delegación Trump reduzca su relación con SpaceX, efectivamente retrasaría la empresa espacial de los Estados Unidos una plazo o más y le daría al software espacial enhiesto de China en la supremacía clara en el marco mundial.
Tesla
Aunque Tesla ha recibido contratos federales a lo generoso de los abriles, estos han sido suficiente pequeños, considerando el tamaño de la compañía, menos de $ 42 millones Entre 2008 y 2024. Pero los subsidios federales son mucho más importantes para el fabricante de automóviles. El crédito fiscal del transporte libre del IRS proporciona hasta $ 7,500 del precio de negocio de un nuevo EV para muchos compradores, y todos los nuevos Teslas arrendados son elegibles para un crédito fiscal comercial de vehículos limpios de $ 7,500. Existen otros créditos fiscales para los clientes de Solar y Powerwall.
Encima, Tesla se ha presbítero ampliamente de la traspaso de créditos de emisiones a otros fabricantes de automóviles, aunque el software “Vehículos de emisiones cero” de California y la Unión Europea asimismo son fuentes de estos créditos adicionalmente del gobierno federal.
Si la delegación Trump efectivamente quisiera dañar a las empresas de Musk, podría ser más efectivo hacerlo a través de agencias reguladoras en sitio de terminar contratos que, en caudillo, benefician al gobierno de los Estados Unidos.
Por ejemplo, la Delegación Doméstico de Seguridad del Tráfico en las Carreteras podría poner los tornillos a los esfuerzos de Tesla para desarrollar características completas de conducción personal y piloto automotriz en sus vehículos. Y la Delegación Federal de Aviación podría detener el codicioso software de naves de naves de SpaceX y evitar una veterano expansión de sus instalaciones de divulgación.
Independientemente de las acciones que la delegación Trump podría tomar para dañar a Tesla, las acciones del fabricante de EV están sufriendo. Al momento de escribir este artículo, el precio de las acciones ha bajado casi un 15 por ciento desde que se abrió el mercado.
Con la voluntad de Trump de usar el vasto poder del gobierno federal para sus propios caprichos, efectivamente no hay fin de las formas en que podría dañar a Musk. Pero algunas de estas medidas asimismo se encargarían de autolesiones al país. ¿A Trump le importaría? ¿Habrá un acercamiento? Como a Musk le gusta opinar sobre los lanzamientos de Starship, “Excitación garantizada”.
El editor automotriz de ARS, Jonathan Gitlin, contribuyó a este referencia. Esta publicación se actualizó el 5 de junio para amplificar comentarios de Musk sobre el desmantelamiento de la nave espacial Dragon.