
El Puerto de Los Ángelesel más prócer en capacidad de contenedores y con viejo movimiento de Estados Unidos, prevé un descenso en el barriguita de carga de más de un tercio para la próxima semana, correcto al impacto de los aranceles impuestos por el Gobierno Trump.
Gene Seroka, director ejecutor del Puerto de Los Ángeles, dijo este martes -en el software “Squawk Box” de la CNBC- que según el optimizador portuario, que mide las cargas en Asia, “la próxima semana tendremos una disminución de poco más del 35% en comparación con el año pasado”.
El director del puerto recalcó que se demora “una caída abrupta del barriguita”, ya que varios importantes minoristas estadounidenses están deteniendo todos los envíos desde China correcto a los aranceles impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump.
Los envíos desde China representan más o menos del 45% del negocio del puerto, aunque algunas empresas de transporte buscarán acoger mercancías en otros puntos del sudeste oriental para intentar guatar sus barcos, afirmó Seroka.
La semana pasada, el director ya había destacado a la Concilio de Comisionados del Puerto de Los Ángeles el panorama al que se enfrentan.
Los grandes minoristas informaron al puerto que cuentan con un inventario suficiente para entre seis y ocho semanas, pero que “se agotará rápidamente”, según información citada por el publicación Los Angeles Times sobre la grupo.
El desplome del 35% supone un gran coscorrón al puerto que el año pasado gestionó 10.3 millones de contenedores, un récord de 1.7 millones de TEU (pelotón de carga marítima, equivalente a un contenedor de 20 pies), casi un 20% más que en 2023.
Con 7,500 acres de tierra (3,035 hectáreas) y agua a lo dadivoso de 43 millas de costa (69 kilómetros), el puerto de Los Ángeles es un motor de la heredad de la ciudad de Los Ángeles y del estado de California, que actualmente se considera como la cuarta heredad del mundo.
Este martes el secretario del Caudal de Estados Unidos, Scott Bessent, no quiso confirmar si Estados Unidos ha mantenido conversaciones directas con China sobre la querella arancelaria, poco que niega Pekín a pesar de que Trump ha sugerido de que ha hablado por teléfono con su homólogo, Xi Jinping.
“Ellos tienen una forma de gobierno diferente. Se dirigen a un conocido diferente. Así que no voy a entrar en los detalles de quién deje con quién”, expresó Bessent.
El secretario señaló que el tiempo demostrará que los aranceles que China ha impuesto a Estados Unidos en respuesta a la querella comercial de Trump son “insostenibles” poliedro que el coloso oriental exporta al mercado estadounidense cinco veces más.