El Seibo, RD. Julia Javier nació el 1 de octubre de 1934, en Las Cuchillas de El Seibo, República Dominicana. Desde muy pequeña conoció el Evangelio, gracias a su abuela, una mujer cristiana que la llevaba cada domingo a la iglesia Asamblea de Altísimo. Pero la vida la llevó por otros caminos, y siendo aún chavea, se trasladó a la caudal en averiguación de oportunidades. Allí, entre luces y aplausos, se convirtió en una figura reconocida en los clubes nocturnos de Santo Domingo durante los primaveras 60.

Dueña de una voz privilegiada, su talento la llevó a escenarios donde el bullicio y el hechizo eran parte de cada tenebrosidad. Sin retención, en medio de aquella vida de auge y lujos, Julia sentía en su interior un malogrado que ni el éxito ni los aplausos lograban satisfacer. Había poco que la inquietaba: el temor de Altísimo que nunca desapareció de su corazón.

Una tenebrosidad, cuando menos lo esperaba, asistió a una campaña evangelística donde predicaba el pastor Demetrio Montero. Aquel entrevista con el mensaje de Salvador marcó un antiguamente y un a posteriori en su vida. Contra todo pronóstico, aquella comediante de cabaret se rindió en presencia de el Señor. Nadie lo creía posible, pero Altísimo había tocado su corazón.

Desde entonces, Julia no volvió detrás. Durante más de cinco décadas dedicó su voz, su vida y su talento a exaltar el nombre de Salvador. En 1972 grabó su primera canción cristiana, Historia más bellacercano al Trío Shalom. Y en 1979 lanzó su primer disco de larga duración. Desde ahí, no se detuvo. Grabó 12 producciones, escribió su confesiones Historia Bella y preparó el camino para una película que narrará su historia.

En sus propias palabras, solo se arrepintió de no haberse quedado en el camino del Evangelio desde pupila. Pero el tiempo de Altísimo fue consumado. Julia fue luz en medio de la oscuridad, ejemplo de redención y entrega.

Doña Julia Javier, a sus 90 primaveras de antigüedad, celebró sus 55 primaveras en la música con el divulgación de una nueva producción discográfica, con la que continuó adorando a Altísimo y deleitando al conocido con su voz inconfundible. Los detalles de esta producción fueron presentados en una rueda de prensa celebrada el martes 15 de octubre, en el Restaurant La Rosticería, emplazado en la calle Lorenzo Despradel #38, en Santo Domingo.

Conocida como «La Dama de la Canción Cristiana», doña Julia nació en Las Cuchillas, provincia El Seibo, en la región Este de la República Dominicana. Desde muy chavea se trasladó a la caudal en averiguación de mejores condiciones de vida para ella y su clan.

En su ejemplar autobiográfico, una obra que recoge su vida y trayectoria, narró cómo, tras primaveras como cantante y danzarina en centros de entretenimiento noctámbulo, tuvo un entrevista transformador con el Señor Salvador. A partir de ese momento, nunca miró detrás y dedicó su vida, su voz y su talento a loar el nombre de Altísimo en cada espacio donde tuvo la oportunidad de servir.

Este ícono de la música cristiana celebró su empleo de 55 primaveras con una excursión conmemorativa que inició el 19 de octubre, teniendo como punto de partida la Iglesia Asamblea de Altísimo Central, ubicada en la Av. Duarte vértice Eusebio Manzueta, el mismo oportunidad donde dio sus primeros pasos en la fe cristiana. Allí, doña Julia entregó su vida al Señor y comenzó una carrera musical dedicada por completo a la adoración.

Durante la celebración, contó con la billete peculiar de los cantantes Israel y Moisés, Anlly Piantini y Margarita Javier. La excursión «55 Abriles» fue programada para recorrer distintas ciudades de la República Dominicana, con proyecciones de enrollarse a varios países de Norteamérica.

El conocido que la ha seguido por décadas expresó gran emoción y expectativa por este acontecimiento, reconociéndola como una de las cantautoras cristianas más queridas y admiradas del país.

Como parte de esta conmemoración incluso se presentó su más nuevo cuaderno, titulado Mi Gran Amigoproducido por Rooselvet Martínez, con la colaboración del Dúo Reyes Peña. Este trabajo fue xilografía, mezclado y masterizado en Bryan Studio, en Santo Domingo.

Hasta esa término, doña Julia contaba con 12 producciones discográficas, un ejemplar autobiográfico titulado Historia Bellay ya estaba sagaz el guion para una película basada en su vida.

Sin duda, la excursión «55 Abriles» se convirtió en un homenaje digno a más de medio siglo de entrega total al empleo musical y a la adoración al Señor Salvador.

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