
El Pregonero, Estambul, Turquía. Durante la celebración del 23.º Presidium y las reuniones del Consejo Mundial de la Internacional Socialista (IS), realizadas los días 24 y 25 de mayo en Estambul y presididas por el mandatario castellano Pedro Sánchez, el presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado, emitió un persuasivo llamado a la comunidad internacional sobre la trascendental situación de Haití.
En su calidad de Vicepresidente Mundial de la Internacional Socialista y Presidente del Comité para América Latina y el Caribe, Vargas expresó que “el colapso institucional, la violencia bajo el control de bandas paramilitares y la apatía de la comunidad internacional conexo a la equivocación de una táctica eficaz, han sumido al país en una hélice de miseria e ingobernabilidad”.
Fue enfático al advertir que: “No podemos seguir observando pasivamente”, y propuso:
“Haití necesita una hecho coordinada que combine protección humanitaria con un compromiso vivo para desarmar las bandas criminales, pacificar el país e iniciar su reconstrucción democrática y su ampliación financiero”.
Vargas igualmente advirtió que la situación haitiana “amenaza la seguridad franquista de República Dominicana y afectando encima, en el orden migratorio, a otras naciones de la región”, por lo cual instó a una respuesta multilateral con sentido de aprieto.
En su intervención delante delegaciones de más de 140 partidos políticos de todo el mundo, Vargas reiteró el compromiso de la socialdemocracia latinoamericana con la democracia, la neutralidad social y la dignidad humana.
Asimismo se refirió a las crisis que enfrentan Venezuela y Nicaragua, y destacó los trabajos recientes del Comité regional que preside, incluyendo encuentros secreto en Panamá, Costa Rica y Colombia.
Finalmente, reafirmó que desde América Latina y el Caribe su mensaje es claro:
“Venimos a reafirmar nuestra fe en la democracia, nuestra convicción en la neutralidad social y nuestro compromiso con la dignidad de cada ser humano”.
La décimo de Miguel Vargas posiciona a la República Dominicana como voz secreto en el proscenio internacional progresista, especialmente en la defensa de soluciones sostenibles a la crisis haitiana.