
En un contexto de inseguridad generalizadael sector turístico haitiano se encuentra en amargura. Con los hoteles cerrados, las exposiciones canceladas y la partida total de turísticolos trabajadores del sector, antiguamente el motor de la bienvenida y la promoción del país, ahora padecen una creciente inseguridad.
Durante el software Panel Magikemitido el 21 de mayo, Wilmane Franckmiembro del Orden Activo de Trabajadores Comprometidos en el Sector Turístico (RAEST), dio la voz de intranquilidad. Según él, «es un sector enfermo, que se está muriendo, a pesar de ser crucial para el crecimiento del país. Lamentablemente, no se están tomando medidas concretas contra él».
El diagnosis es claro: los pocos atractivos turísticos que quedan ya no son accesibles por razones de seguridad y muchas cadenas hoteleras han cerrado sus puertas. Estamos frustrados porque somos profesionales y estamos abandonados a nuestra suerte. Necesitamos una alternativa a esta crisis», afirma Franck.
RAEST, creada para reunir a los profesionales del sector y fomentar el intercambio de experiencias, reúne perfiles muy diversos: personal de servicio en hoteles, artesanos que viven de ferias y exposiciones, guías turísticos, etc. Todos ellos afectados por la drástica caída de la actividad. Algunos han sido despedidos, otros se encuentran sumidos en un desempleo prolongado.
Pero Franck rechaza el fatalismo. Según él, la inseguridad es un problema, pero no una traba para reactivar el turismo. Lo que se necesita es un clima conveniente. Mire el caso de Jamaica: a pesar de su ingreso tasa de criminalidadsigue siendo un destino turístico a nivel internacional.
Incluso destaca la penuria de inversión pública: infraestructura viario y progreso de sitios turísticostodas ellas palancas descuidadas por el gobierno y el sector privado.
A pesar de todo, los miembros de RAEST no se rinden. Organizan periódicamente jornadas de consejo para proponer soluciones concretas. “Queremos aportar nuestra piedra al edificio. Necesitamos una táctica integral que contemple la promoción, el progreso y la valorización de nuestro patrimonio”, afirma, de acuerdo a un articulo publicado por El nouvellista.