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Santo Domingo. Los Knicks de Nueva York confirmaron su reto a la conexión con la cariño dominicana con el «viewing party» realizado para el primer partido de la serie semifinal de conferencia este lunes 5 de mayo, celebrado en el Hard Rock Café de esta ciudad.
El conjunto de Nueva York logró el triunfo en tiempo extra con registrador 108-105 para tomar el comando en la serie (1-0), con una representación de 14 puntos y 13 rebotes de Karl-Anthony Towns, que vio su representación limitada a 31 minutos por meterse en problemas de faltas.
Los Knicks están conscientes de tener una extensa cojín de fanáticos en el paraje dominicano y aprovecharon el marco del comienzo de la serie semifinal de la conferencia este de la NBA para demostrar el interés que tienen de acercarse a la tierra de su principal componente, Karl-Anthony Towns.
El conjunto que tiene como casa «La Mecca» del baloncesto mundial, el Madison Square Garden, manifestó su nivel de complacencia y alegría de poder organizar en el país una actividad como esta.
Un sabor peculiar
La serie entre los Knicks y los Celtics tiene un sabor muy peculiar en esta ocasión. Por primera vez en la historia, las dos principales figuras del baloncesto dominicano, Karl-Anthony Towns, por el conjunto de Nueva York y Al Horford, por Boston, se ven las caras en un partido de postemporada.
Este esfuerzo de los Knicks por conectar con la comunidad dominicana, aprovechando el cruce entre Towns y Horford, es una organización inteligente, por el nivel de atención que tendrá la misma en el país y por todos los dominicanos que viven en la ciudad de Nueva York y todo el mundo.
La emoción del baloncesto de la NBA se eleva a su máxima expresión en la semifinal de la conferencia este, el fervor que genera este duelo en el país, le permite a los New York Knicks a dar este significativo paso para acercarse aún más a su comunidad dominicana.
Esta iniciativa no es un hecho separado. En los últimos tiempos, los Knicks han mostrado un interés creciente en conectar con la rica civilización dominicana presente en Nueva York y la presencia de Towns, un componente que ha demostrado su compromiso con sus raíces, ha sido un delegado secreto en este acercamiento.
Su talento en la cancha y su identificación con la comunidad han resonado profundamente entre los aficionados, estos dos jugadores representan diferentes generaciones y equipos y que se puedan deshacer en un duelo por un circunstancia en las finales de conferencia es un motivo de orgullo para toda la nación.
Una muestra palpable
El «viewing party» organizado por los Knicks es una muestra tangible de cómo el equipo averiguación construir puentes con su cariño dominicana, reconociendo su pasión y su importancia internamente del alicatado cultural de Nueva York.
Al ofrecer un espacio para que los seguidores se reúnan y disfruten del partido en un circunstancia festivo, los Knicks no solo fomentan el espíritu de comunidad, sino que igualmente fortalecen su cojín de fanáticos.
Los fanáticos presentes recibieron souvenirs del equipo de Nueva York y participaron en diversas rifas de jerseys del equipo, con la animación de los comunicadores Natacha Peña y Juan Báez.
Este esfuerzo de los Knicks por conectar con la comunidad dominicana, es una organización inteligente y sensible. Reconoce la influencia y el entusiasmo de esta comunidad por el baloncesto y, en particular, por sus representantes en la NBA.
Sin duda, esta semifinal será seguida con peculiar atención en el país y por los dominicanos de Nueva York y todo el mundo.
