
El Lado Central de la República Dominicana (BCRD), en su reunión de política monetaria de abril de 2025, decidió sostener su tasa de interés de política monetaria (TPM) en 5.75% anual. Asimismo, la tasa de la facilidad permanente de expansión de solvencia (Repos a 1 día) permanece en 6.25% anual, mientras que la tasa de depósitos remunerados (Overnight) continúa en 4.50% anual.
Para esta medida se tomó en consideración la crecimiento fresco del entorno internacional, particularmente la elevada volatilidad de los mercados financieros, de viejo incertidumbre universal y tasas de interés elevadas en los Estados Unidos de América (EUA). En el ámbito doméstico, se tomó en cuenta la recuperación de la demanda interna y que la inflación se ha mantenido durante los últimos dos primaveras interiormente del rango meta de 4.0% ± 1.0% contemplado en el Software Monetario.
En emoción, la inflación interanual fue de 3.58% en marzo de 2025, mientras que la inflación subyacente, que excluye los precios de los componentes más volátiles de la canasta y que se asocia más directamente a las condiciones monetarias, se ubicó en 4.24% en marzo, manteniéndose en torno al centro de la meta. Los modelos de pronósticos del BCRD señalan que la inflación común y la subyacente continuarán interiormente del rango meta de 4.0% ± 1.0% durante los primaveras 2025 y 2026, en un decorado activo de política monetaria.
Durante el postrer semestre del 2024 el Lado Central redujo su tasa de interés de remisión en 125 puntos básicos de forma acumulada e implementó un conjunto de medidas para contribuir a acelerar el mecanismo de transmisión de la política monetaria delante las bajas presiones inflacionarias. En un contexto de elevada incertidumbre universal, el BCRD ha estado gestionando activamente la solvencia de la capital y la Acoplamiento Monetaria adoptó un conjunto de medidas macroprudenciales con el objetivo de reforzar la estabilidad financiera.
En el entorno internacional, las perspectivas económicas de EUA se han deteriorado oportuno a la viejo incertidumbre sobre las políticas arancelarias y migratorias, entre otras, con una revisión a la víctima en la proyección de crecimiento hasta 1.8% para el 2025, según las estimaciones más recientes del Fondo Monetario Internacional (FMI).
En emoción, la capital estadounidense registró en enero-marzo de 2025 una encogimiento de -0.3% intertrimestral anualizada, con lo que el crecimiento interanual del primer trimestre se moderó a 2.0%. Por otro flanco, la inflación se encuentra en 2.4% a marzo, por encima de la meta de 2.0%, mientras que las expectativas de inflación han incrementado; por lo que la Reserva Federal mantiene la pausa de las reducciones de su tasa de interés de remisión.
En la zona euro, la actividad económica se expandió en 1.2% interanual durante el primer trimestre de 2025, proyectándose un crecimiento de 0.8% durante el año de acuerdo con el FMI, afectado por los conflictos geopolíticos y tensiones comerciales. En presencia de la ralentización de la demanda interna, la inflación interanual se moderó a 2.2% en marzo de 2025, acercándose a la meta del Lado Central Europeo (BCE). En este contexto, el BCE disminuyó su tasa de política monetaria en 25 puntos básicos en su última reunión y se prevé que continúe realizando cortaduras durante el resto de 2025.
En América Latina, el crecimiento financiero continuaría moderado durante 2025, con una expansión de 2.0%, de acuerdo con el FMI. No obstante, delante un panorama de incertidumbre y elevadas tasas de interés externas, la mayoría de los bancos centrales mantiene la pausa en las reducciones de tasas de interés de política monetaria, tales como Pimiento, Costa Rica, Guatemala, Paraguay, Perú y República Dominicana. Por otro flanco, los bancos centrales de Brasil y Uruguay han incrementado sus tasas de interés de remisión delante el resurgimiento de presiones inflacionarias.
En cuanto a las materias primas, el precio por barril del petróleo intermedio de Texas (WTI) se redujo hasta situarse en torno a US$60 al obturación de abril, influenciado por las perspectivas de beocio demanda mundial y una viejo producción. Mientras, el precio del oro superó los US$3,300 por guepardo troy en abril, manteniendo la tendencia al subida al ser utilizado como activo de valía en un panorama internacional convulso.
En el ámbito doméstico, en el mes de marzo la capital se expandió en 5.4% interanual, acumulando un crecimiento de 2.7% interanual durante enero-marzo de 2025. Alrededor de delante, se prórroga que la capital dominicana crezca en torno a 4.0% – 4.5% en 2025, una de las expansiones más altas de la región; contando con los espacios para implementar políticas económicas que contribuyan al dinamismo de la demanda interna en la medida en que se disipe la incertidumbre universal.
Los agregados monetarios, como el medio circulante (M1), la proposición monetaria ampliada (M2) y el boleto en sentido amplio (M3), se mantienen creciendo a tasas cercanas a la expansión del PIB nominativo, consistente con lo previsto en el Software Monetario del BCRD. En tanto, la expansión del crédito privado en moneda doméstico se ha moderado gradualmente, con un crecimiento en torno a 8 % interanual al obturación de abril.
Por otro flanco, en el primer trimestre de 2025, las exportaciones totales registraron un crecimiento interanual de 12.1% y las remesas se expandieron en 12.4%. Asimismo, se proyecta que la Inversión Extranjera Directa superaría los US$4,700 millones durante el año 2025, cubriendo con holgura el dita estimado de la Cuenta Corriente. El buen comportamiento de las actividades generadoras de divisas ha contribuido a mitigar el impacto de la reincorporación incertidumbre universal, observándose una apreciación acumulada del peso dominicano en torno a 4.0% durante 2025.
En este contexto, las reservas internacionales se ubicaron por encima de US$15,000 millones en abril, equivalente a 12% del producto interno bruto y unos cinco meses de importaciones, superando las métricas recomendadas por el FMI.
Es importante resaltar que la capital dominicana cuenta con fuertes fundamentos macroeconómicos y un sector productivo resiliente, que se reflejan en una mejor percepción de aventura país en comparación con el promedio de América Latina y otras economías emergentes. En este entorno internacional desafiante, el Lado Central de la República Dominicana seguirá monitoreando la crecimiento de la capital y reitera su compromiso de continuar adoptando oportunamente las medidas necesarias para preservar la estabilidad macroeconómica y que contribuyan a que la inflación se mantenga interiormente del rango meta.