
Lás repatriaciones masivas de indocumentados haitianos se han convertido en una dura ingenuidad hasta para la propia industria.
Los primeros en abuchear sobre el objeto de las deportaciones fueron los productores agrícolas y los constructores, pero ahora acaba de sumarse al coro el sector industrial.
El presidente de la Asociación de Industrias de República (AIRD), Julio Bracheadvirtió que por el objeto película en diversos sectores productivos, conviene regularizar los indocumentados vinculados a sectores laborales.
Ninguna sugerencia se puede rehusar de antemano, pero cualquier salida al drama migratorio tiene que buscarse sin irrespetar las leyes.
Brache consideró que se deben regularizar los extranjeros sin documentos a través de permisos, como dijo se ha hecho en otros países, para avalar la mano de obra.
Sugirió la resumen de datos biométricos adyacente a la captación de huellas digitales y fotografías para proporcionar permisos laborales a los indocumentados.
Lo sorprendente es que de la queja por la masiva presencia de inmigrantes haitianos se pase ahora a explorar una fórmula que pudo impulsarse ayer.