El dominicano José Ramírez sigue insoportable al tablón, mientras carga con los Guardianes de Cleveland. Este sábado, Ramírez recibió una pulvínulo por bolas en la primera entrada del partido contra los Houston Astros, para extender su jugada de embasarse a 33 juegos, que inició el pasado 30 de abril.

Luego recibió otro boleto en la tercera entrada. Abrió la sexta entrada con un sencillo. En la séptima, disparó el cuadrangular 12, con un compañero en pulvínulo, para igualar el partido a tres carreras. Concluyó el pernio bateando de 3-2, con dos anotadas, dos remolcadas y dos boletos en la derrota de su equipo 5-3 en 10 entradas.

Nunca antiguamente había cogido esas staff en su ilustre carrera. «La jugada de 33 juegos embasándose para Ramírez es un nuevo récord personal. La más larga desde que Jason Kipnis tuvo una de 36 juegos entre el 26 de mayo y el 5 de julio de 2013”, publicó Tim Stebbins, habituado de los Guardians, en X.

El próximo objetivo de J-Ram es igualar la jugada de 36 juegos embasándose, lograda por Kipnis en el año en que Ramírez debutó en la MLB: 2013.

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A sus 32 abriles, Ramírez sigue haciendo cosas increíbles en el plato. Ha estado en medio de una jugada impresionante, que llevó su tendencia ataque universal a un inexistente .333/.390/.558.

Ese wRC+ de 158 sería su marca más reincorporación desde la temporada 2020, y la mejor de su carrera si solo contamos las temporadas completas. Todavía tiene 12 jonrones y 17 bases robadas.

Una vez más, Ramírez carga con los Guardianes.