
El Parlamento israelí rechazó la mañana del jueves, por estrecha mayoría, un plan de ley presentado por la concurso para disolver el cuerpo asamblea, lo que habría llevado a elecciones anticipadas.
Votaron contra el texto 61 de los 120 diputados del Knéset, y 53 lo hicieron a honra, en una leída preliminar.
La concurso presentó el plan cuando la mayoría aparecía desunida sobre la polémica conscripción de judíos ultraortodoxos, y esperaban derrotar al gobierno atrayendo a los partidos ultraortodoxos aliados al primer ministro, Benjamin Netanyahu.
Los partidos Shas y Sionismo Unido de la Torá (JUT) amenazaron con sumarse a la iniciativa correcto a su concurso a la ley de reemplazoque investigación terminar con la exención del servicio marcial para los judíos ultraortodoxos.
Durante décadas, los ultraortodoxos se han beneficiario de una exención del servicio marcial, un privilegio cada vez más criticado en la sociedad israelí, en plena guerrilla con el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Lazo desde el 7 de octubre de 2023.
Con el fracaso, la concurso tendrá que esperar seis meses para presentar otra iniciativa similar.
- Netanyahu aún deberá enfrentarse a una parte de su partidoel derechista Likud, que impulsa la ley de conscripción de los ultraortodoxos.
Pero su ministro de Finanzas, Bisalel smotrichde extrema derechadeclaró durante la sesión del Knéset que derribar al gobierno en tiempo de guerrilla constituiría un “peligro existencial“a Israel.
“La historia no perdonará a quien lleve al Estado de Israel a elecciones en tiempo de guerrilla”, declaró.