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Inversiones Turino SRL, representada por Gamal Haché, solicitó y obtuvo todas las fechas esencia en los dos recintos, pero no ha ejecutado ningún concierto, afectando la riqueza del entretenimiento y cerrando el paso a otros productores.
El Pregonero, Santo Domingo – Una preocupante situación de acaparamiento afecta al sector de espectáculos en República Dominicana tras la empresa Inversiones Turino SRL, de Gamal Hachéha solicitado y obtenido múltiples fechas en el Estadio Descarado Félix Sánchez cubriendo prácticamente todos los meses desde junio de 2024 hasta diciembre de 2025, sin realizar un solo evento hasta la término.
Según consta en los documentos depositados, todas las solicitudes fueron presentadas de modo organizada y en pedrusco el 11 de abril de 2024, abarcando casi la totalidad del calendario anual en los dos estadios principales del país. Cada carta especificaba periodos completos de uso de más de una semana hasta quince días, lo que, en conjunto, representa un asedio sistemático de la memorándum de los dos recintos durante más de un año y medio.
Lo que en principio parecía una planificación de gran envergadura por parte de la empresa, ha terminado por convertirse en una parálisis programada del entretenimiento masivo, sin que se haya montado una sola tarima, vendido un boleto ni ejecutado un solo concierto.
Esta situación impide que otros productores puedan optar por fechas en dichos recintos, afectando directamente a la riqueza cultural y al ecosistema de empleos que excursión en torno a los espectáculos.
La partida de una utilización efectiva de estos espacios ha despertado inquietud entre representantes del sector exquisito, quienes advierten que se negociación de una maniobra de concentración de espacios públicos que atenta contra la vaco competencia.
Esta inacción prolongada no solo representa una pérdida de oportunidades para la industria cultural, sino además para el Estado, que deja de percibir ingresos por arriendo, impuestos y servicios indirectos.
La desidia de respuesta por parte del Profesión de Deportes y Asueto (MIDEREC) agrava la situación, ya que hasta el momento no se han emitido explicaciones sobre los criterios de asignación, ni sobre posibles consecuencias delante la no utilización de los recintos por parte de la empresa que los ha reservado.
Mientras tanto, los principales escenarios del país permanecen cerrados a la civilización y al avance financiero que cada evento exquisito puede gestar.
