«Lo que queremos hacer es un software de autodeportación, que ni si quiera hemos anunciado todavía (…) Vamos a darles mosca y un billete de avión. Luego trabajaremos con ellos, si son buenos, para que vuelvan lo más rápido posible», ha claro en una entrevista grabada con la dependencia de televisión estadounidense Fox News.

Trump, que ha prometido deportar a un número record de migrantes irregulares, ha puesto a prueba los límites legales para aumentar los energía y deportaciones. Su Despacho ha presionado todavía a los migrantes para que colaboren con su propia expulsión.

Desde que volvió a la Casa Blanca, ha enviado migrantes a una megacárcel en El Salvador y a la cojín naval de Guantánamo, en Cuba. El portavoz adjunto de la Casa Blanca, Stephen Miller, ha afirmado que pretenden deportar a «mucho más» de un millón de migrantes sin documentación en un año.

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