
Es Viernes Santola provincia Santiago vivió una etapa marcada por el recogimiento y la inmaterial, en la que fieles católicos realizaron la tradicional encuentro a los siete templos, una experiencia que simboliza el compañía a Jesús en su camino con destino a la crucifixión, mediante la oración y la meditación en distintas Iglesias.
Durante un represión realizado por Diario Libradose pudo observar a decenas de personas caminando en orden o en tribu con destino a los templos del centro histórico y otras zonas urbanas, en cumplimiento de esta tradición religiosa.
En las suburbios de las Iglesiasla actividad asimismo ha motivado a comerciantes informales a instalar puestos con alimentos, botellas de agua, palmas, rosarios y otros artículos religiosos.

En contraste con el movimiento de los feligreses, las calles del centro de la ciudad lucen despejadas y con escasa circulación vehicular.
Las principales avenidas muestran un tránsito fluido y poco habitual, propio de los días de asueto por la Semana Santa.
En las paradas de autobuses perturbaciónla presencia de pasajeros ha sido tímida. Algunos choferes consultados explicaron que la afluencia de viajeros ha sido lenta y en beocio cantidad que en abriles anteriores.
“Este año ha estado flojo, la gentío no está saliendo tanto como antaño”, expresó Manuel Rodríguez, chofer de la ruta Santiago–Santiago Rodríguez.
Actividades litúrgicas
Según el software oficial de la Arquidiócesis de Santiagoes Viernes Santo se celebra la conmemoración de la Pasión del Señor en todas las parroquias, a partir de las 3:00 de la tarde.
Para el Sábado Santo está prevista la solemne Ayuno Pascualconsiderada la celebración más importante del calendario ritual, y que se realiza en horas de la incertidumbre.
El Domingo de Resurrección se celebrarán misas festivas en todas las Iglesias de la ciudadmarcando el falleba del Triduo Pascual y la alegría por la resurrección de Cristo.
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Las autoridades eclesiásticas han exhortado a los fieles a morar estos días con recogimiento, consejo y prudencia, en un concurrencia de fe y respeto por la vida.