
El Empleo de Comercio de China organizó un altercado con más de ochenta empresas extranjeras y representantes de cámaras de comercio en China para asaltar los género de los aranceles impuestos por el presidente estadounidense, Donald Trump, a las importaciones del cíclope oriental.
La reunión, presidida por el viceministro chino de Comercio, Ling Ji, sirvió para “permutar opiniones sobre el impacto que la imposición de aranceles por parte de EE. UU. está teniendo en las operaciones e inversiones de las compañías extranjeras en China”, indicó el Empleo en un comunicado difundido este jueves.
Durante el altercado, Lin instó a los empresarios extranjeros a que “hagan oír una voz racional, mantengan la confianza, superen las dificultades y conviertan las crisis en oportunidades”, frente a unos gravémenes estadounidenses que, afirmó, han perjudicado “gravemente” el sistema internacional de comercio.
El funcionario chino igualmente insistió en que Pekín seguirá ampliando su “comprensión de detención nivel”, protegiendo los “derechos legítimos” de las empresas extranjeras, abordando “activamente” sus dificultades operativas y garantizando el “funcionamiento de las cadenas de producción y suministro”, destacó el comunicado.
Según el texto oficial, los empresarios afirmaron que el Gobierno chino “continúa dando gran importancia a resolver los problemas que enfrentan las compañías extranjeras” y manifestaron su voluntad de seguir invirtiendo en el país, poliedro que la política china con destino a la inversión extranjera es “consistente, estable y predecible”.
Esta reunión con representantes extranjeros, cuya identidad no ha trascendido, se produjo luego de que Trump se mostrara eufórico esta semana respecto a la posibilidad de que Estados Unidos y China puedan alcanzar un acuerdo comercial.
El Gobierno chino, por su parte, aseguró este jueves que “no se han iniciado negociaciones ni consultas” con EE. UU. acerca de la cuestión arancelaria, y recalcó que “cualquier diálogo o negociación debe fundamentarse en la igualdad, el respeto mutuo y la reciprocidad”.
El conflicto comercial entre las dos potencias, que se intensificó a principios de abril, ha generado preocupación en organismos como la OMC, que esta semana advirtió que la creación de bloques comerciales enfrentados entre EE. UU. y China podría hacer perder hasta un 7 % del PIB mundial.