Ella es un testificación vivo de que la resiliencia y la perseverancia son claves fundamentales para alcanzar el éxito. Su historia está marcada por la pérdida de su consorte, una situación que la llevó a contraer el liderazgo de su negocio en una industria tradicionalmente dominada por hombres.

Caroline Diplan, es máster en neurocoaching y experta en temas de  opulencia y fortuna. Sin incautación, su tenacidad, sumada a un firme compromiso con el formación constante, le ha permitido mantenerse vivo y destacar en el competitivo mundo de los supermercados, donde acumula más de 30 abriles de experiencia.

Su propósito radica en orientar a las personas a curar sus heridas con el fortuna para que tengan una vida próspera y exuberante. Para ello, creó Neuro Money, un espacio que brinda herramientas para programarse para la riqueza y habitar con franqueza financiera. Encima, escribió los libros “100 principios de opulencia: Un alucinación alrededor de la riqueza infinita” y “El best seller del fortuna: Tu destino es la riqueza”.

Diplan fundamenta su encomienda de orientar a sus “coachees” alrededor de una sanación integral en una sólida almohadilla de certificaciones y su extensa trayectoria empresarial. Su examen por AEAPro como coach internacional en 219 países es solo una parte de su preparación.

Diplan cuenta con un “Máster Neurocoach de Integral Coaching” y posee diversas especializaciones, incluyendo terapeuta biodesprogramadora y certificada en hipnoterapia por el prestigioso Instituto de Biodesprogramación Fernando Sánchez, encima de estar certificada en Dinámicas del Stop Impacto por el Firewalk American Institute.

“Neurocoaching”

Su abuela tuvo un papel secreto en su historia y en su interés por apoyar a otras personas a mejorar su relación con el fortuna. Destaca que ella sembró la semilla de la opulencia: “Siempre me decía que era capaz de tener todo lo que yo quería, porque era una pupila que había nacido en situaciones especiales”.

Recuerda que le relataba que, al venir al mundo, fue “rodeada de oro, porque todo el que caldo a conocerte trajo poco de oro para ti”. Su abuela siempre se lo repetía, sin asimilar que la estaba bioprogramando para la riqueza y la opulencia.

Según Diplan, esa mentalidad le ha permitido ser una líder que multiplica “con facilidad” los posibles en los diferentes proyectos en que ha trabajado, y lo mismo enseña a sus coachees.

“Esas fueron unas creencias que crearon una programación en mí: donde yo ponía la mano, el fortuna se reproducía. Pero no era más que la mentalidad de que yo creía que lo podía hacer”, asegura, al precisar que esto estaba asociado a la imagen de que su “abuela no decía mentiras. Era una mujer que lo que decía se cumplía”.

La asesinato de su consorte puso a prueba todas sus capacidades y habilidades para tramitar negocios y crear riqueza. Durante el proceso de entrega de la herencia, perdió su casa, negocios e inversiones que tenían en conjunto, lo que la obligó a reinventarse.

“A mí lo que me preocupaba era, positivamente, que la vida de mis hijos, singular de que perdían a su papá, cambiara; que tuvieran que dejar sus amiguitos de la escuela, porque quizás no podría pagarla ni sus actividades extracurriculares”, recuerda.

Sin incautación, prometió que la vida de sus hijos no iba a cambiar. “Entonces me propuse: voy a habitar como si mi consorte se hubiera ido de reposo y voy a hacer las cosas como él las hacía”.

Así diseñó su esquema de trabajo, y seis meses luego se demostró a sí misma y al equipo que lo lograrían y mantendrían su negocio. “Me acuerdo que hicimos una reunión y les dije: ‘Lo pudimos hacer’. Esto significa que lo vamos a poder hacer. Ahora vamos a implementar cosas que yo quería implementar y él por miedo no se atrevía”.

“¡Mundo, agárrate que si lo hice, lo voy a seguir haciendo!”, fue la frase que la acompañó durante varios abriles, hasta que, luego de recuperar la estabilidad financiera y estar casi siete abriles enfocada en sus negocios, un episodio de depresión la llevó a replantearse profesionalmente.

“Cuando, al extremo de casi siete abriles en que ya lograba estabilizarme, pagarle a todo el mundo, me había regalado un vivienda en República Dominicana, había vuelto a comprar otras propiedades, o sea, estaba en el momento en que se supone que debía estar contenta, entré en una depresión muy musculoso”, recuerda.

Inició su proceso de sanación y encontró un nuevo propósito: orientar a las personas a curar sus heridas con el fortuna para alterar la escasez en riqueza. Se preparó en varios niveles, incluyendo maestrías y certificaciones: “Empecé a hacer las certificaciones de neurocoaching, hice industria de neurocoaching, seguí con biodesprogramación, entre otras”.

Gracias a su software Neuro Money, sus libros y eventos presenciales, se ha convertido en un referente que apoya e inspira a curar y diseñar una vida exuberante. Compartir su testificación y conocimientos a través de Instagram (@carolinediplan) le permitió conectar con más de 130,000 personas y aportar en su proceso de creación de riqueza.

Libros de su autoría

Escribir “100 principios de opulencia: Un alucinación alrededor de la riqueza infinita” no fue solo un acto de inspiración, sino un mandato divino. “Este manual fue una instrucción clara de Altísimo. Yo me resistía, decía: ‘¿Quién lo va a acertar?’. Pero no fue un esquema comercial, fue una encomienda”, confiesa.

A pesar de sus dudas iniciales, Diplan estructuró el manual basado en su propia rutina: “Me evalué a mí misma: cómo me levanto, cómo manejo mis negocios, y de ahí nacieron los principios. Es mi historia personal convertida en derrotero para otros, sobre todo para madres que desean romper patrones y criar hijos conscientes de su valía y su poder”.

Explica que no es un manual para “hacerse rico”, sino para habitar con propósito. “La opulencia no es solo fortuna. Es vigor, invariabilidad emocional, conexión espiritual. Muchas personas viven en escasez sin saberlo. Este manual te permite identificarlo y sanarlo”.

A través de los capítulos, derrotero al leyente para que descubra las heridas, frustraciones y creencias que lo alejan de la prosperidad. “Trabajamos el significado que tiene el fortuna para ti, lo que representan las deudas y las emociones que hay detrás. Ahí está la secreto para emprender a crear una nueva ingenuidad financiera”.

Posteriormente recomienda acertar “El best seller del fortuna: Tu destino es la riqueza”, donde revela cómo la pobreza no es solo una situación económica, sino una enfermedad mental perpetuada a través de generaciones. Con ejemplos prácticos y lecciones históricas, invita a los lectores a reprogramar su mente y alterar sus creencias limitantes.

“Neuro Money

A partir de su experiencia, acaecer tenido mucho, perderlo todo y retornar a levantarse, Caroline creó su propio método: Neuro Money. “No puedes enseñar opulencia si no has superado una declive financiera. Yo sé cómo se siente y además cómo se sale de ahí”.

Este sistema reúne su historia, sus certificaciones y sus aprendizajes de vida. Está arreglado en una plataforma digital que incluye libros, talleres, mentorías y posibles de apoyo. “En Neuro Money están los talleres ‘Radicar en opulencia’, ‘Huella riqueza’, ‘El planisferio de la riqueza’, los libros e incluso una bloc que acompaña el proceso. Ahora estamos desarrollando un sistema financiero completo para que las personas tengan herramientas incluso luego de terminar las sesiones conmigo”.

Permanencia

Para Diplan, una secreto para liderar con éxito es “mantenerse a la vanguardia”. “Soy una mujer a la que le gusta mucho educarse. Soy estructurada, pero muy moderna. Si hay que educarse, aprendo; me mantengo siempre viendo qué está funcionando y esto me ha permitido cambiar”.

Diplan exhorta a los emprendedores a no “dejarlo en Dios en todo el mundo” al hacer negocios. Destaca que es importante rodearse de personas con principios éticos y títulos, porque “en la integridad hay fortuna”.

Además invita a evaluar el historial crediticio de potenciales socios, ya que puede alertar sobre su nivel de aventura y compromiso. “Si ves que una persona tiene problemas económicos, le debe a los bancos y no tiene crédito, no está apta para asociarte, porque te van a patinar”.

“No invalido el conocimiento de quienes tienen resultados, pero no sigas consejos de quienes no han creado mínimo”, expresó, refiriéndose al impulso de distinguir entre quienes hablan desde la teoría y quienes han represión el camino con resultados tangibles.