En uno de sus últimos mítines antaño de las elecciones generales del lunes, el líder del Partido Dadivoso de Canadá y primer ministro del país, Mark Carney, solicitó a los canadienses que le concedan un “Gobierno esforzado” para enfrentarse a la “traición” de Donald Trump que ha claro una conflagración comercial contra los canadienses.

En un multitudinario mitin celebrado en un hangar aeronáutico en la ciudad de Mississauga, en las cercanías de Toronto, Carney centró sus ataques en el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por amenazar a Canadá y el líder del disidente Partido Conservador, Pierre Poilievre, por carecer de experiencia fuera del mundo de la política.

El economista que en marzo sustituyó a Justin Trudeau al frente del Partido y del Gobierno de Canadá afirmó que el país necesita un Gobierno esforzado porque “la conflagración comercial del presidente Trump fielmente ha roto la capital universal y ha traicionado Canadá, el vecino de Estados Unidos, su más cercano amigo y su coligado más inquebrantable”.

Carney, que según las encuestas ganará las elecciones del 28 de abril, repitió en varias ocasiones sus ataques a Trump. Y cada vez que mencionó el nombre del presidente estadounidense, el heterogéneo notorio de varios miles de personas en el que destacaban sijes y otras minorías asiáticas- rompió en abucheos.

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“Este es el momento para un liderazgo serio y este es el momento de unirnos como un país porque necesitamos disputar, protegernos y triunfar. Tenemos que disputar los aranceles de Trump, con aranceles de represalia que hagan el mayor daño en EE.UU. Necesitamos proteger a nuestros trabajadores”, continuó Carney.

El único momento que alteró el estandarte fue cuando dos manifestantes propalestinos interrumpieron el discurso del líder independiente con gritos de “exterminio”. Entreambos fueron rápidamente desalojados del perímetro por agentes de seguridad.

El líder independiente afirmó que los ataques de Trump, que encima de imponer con aranceles miles de millones de dólares de importaciones canadienses ha expresado su deseo de anexionar Canadá incluso utilizando “la fuerza económica”, tienen un objetivo: “rompernos para que EE.UU. se convierta en nuestro dueño”.

Carney, con la aprobación del notorio que ondeaba banderas canadienses, aseguró que eso nunca pasará porque “Canadá no es EE.UU.”.

“EE.UU. es un crisol cultural, Canadá ¡mirar a esta multitud, somos todos canadienses-, es un azulejo”.

Sobre su principal rival en las elecciones del lunes, el líder conservador Pierre Poilievre, Carney afirmó que es un “político de toda la vida que adora el altar del huido mercado a pesar de que nunca ha trabajado en el sector privado”.

“Es el tipo de político, que presume de esto, que nunca ha cambiado de ideas desde que tenía 17 primaveras”, añadió. Los que están aquí que tienen más de 17 primaveras, ¿han aprendido poco en las últimas décadas? No necesitamos lemas, necesitamos soluciones.

“Este es momento para experiencia, no experimentos”, insistió, en narración a sus credenciales como administrador del Faja de Canadá (2008-2013) y del Faja de Inglaterra (2013-2020), cuando se tuvo que enemistar a varias frentes de grandes magnitudes.

“Unidos defendemos Canadá. Unidos ganaremos esta conflagración comercial, construiremos la capital más esforzado del G7 que funciona para todos. Estoy aquí hoy porque Canadá me ha legado todo: mi clan, mi educación y mis títulos. Y a cambio, estoy dispuesto a darlo todo a Canadá”, concluyó.