
Colombia revivir el mal remembranza de las peores épocas de la violencia política: los atentados contra aspirantes a la presidencia como Miguel Uribey senador de derecha baleado el sábado durante un acto sabido.
El regicidio es otra mancha en la política colombianade una trágica serie que inició con el homicidio de un líder espléndido en 1948. Luego, entre 1987 y 1990, cuatro candidatos a presidente cayeron víctimas de ataques de sicarios aparentemente pagados por las capos de la cocaína que le declararon la eliminación al Estado y la democracia.
Esos casos involucraron como presuntos responsables al fallecido Pablo Escobar y otros narcotraficantesdirigentes políticos y agentes del Estado aliados.
En aquella época, las víctimas fueron líderes de la izquierda y progresistas. Esta vez, con el atentado contra Uribe, se prostitución de un zagal senador de derecha Y conservadorde 39 abriles, que meses a espaldas anunció su aspiración de reemplazar al presidente Gustavo Petro en las elecciones de 2026.
Aunque oficialmente no inició la campañase reunía en un ensanche popular con posibles votantes. Cuando tenía micrófono en mano abrieron fuego y cayó herido por tres disparos, según el personal médico que lo atendió en el oportunidad. Un zagal de 15 abriles es sospechoso de ser el gatillero y fue capturado.
“La historia se repite y luego nuestro deber es detener esa repetición“, dijo en una disertación Petro, señalado como responsable por algunos sectores de la derecha por supuestamente promover mensajes de odio contra la competición, señalamientos que él considera “oportunista“.
“Campaña violenta”
“Los grandes hitos políticos en Colombia han estado muy marcados por la violenciadesafortunadamente. Eso ha sido una característica que nos ha llevado de una plazo a otra“, dice a la AFP Laura Bonilla, investigadora del centro de estudios Fundación Paz y Reconciliación.
En 1948, el popular líder espléndido y candidato presidencial Jorge Eliecer Gaitán cayó desplomado en una avenida de Bogotá víctima de tres disparos. Ese homicidio sumió al país en una oleada de violentos disturbios y marcó el inicio de una era de violencia bipartidista entre liberales y conservadores.
Cuatro décadas a posteriori la raza siguió corriendo: fueron asesinados el comunista Jaime Pardo Devoto (1987), el espléndido Luis Carlos Apuesto (1989) y los izquierdistas Bernardo Jaramillo y Carlos Pizarro (1990), un comandante de la grupo M-19 que firmó la paz.
Con la venida de Petro al poder en 2022 para convertirse en el primer presidente de izquierda del país, se creía que esta praxis había quedado en el olvido.
Pero sin que se conozcan aún las razones del ataque contra Uribe, analistas lamentan un retrocesoen particular de cara a las elecciones de 2026.
“El atentado contra Miguel Uribe marca un regreso a los peores momentos de violencia política en el país”, condenó en la red X Juanita Goebertusdirectora para las Américas de Human Rights Watch.
Bonilla coincide: “Habíamos cedido por superada esa época (de violencia). Muchos de nosotros analistas estábamos dando por cerrado un ciclo y aparece este atentado puntual en este momento en una campaña que se advertía (…) que iba a ser una campaña violenta“.
Tumulto de violencia
Los disparos contra Uribe son un “ya pasado” para la mayoría de los adultos en Colombia.
“Me recuerda (a la violencia) de muchos abriles tras”, dijo a la AFP Rafael Navarroun exministro de Jurisprudencia que acudió hasta la clínica donde fue atendido Uribe.
Los magnicidios de los abriles 80 y 90 quedaron en la impunidad e hicieron más profundas las diferencias políticas en un país con actores armados ilegales que impidieron el mejora de figuras que amenazaban sus intereses.
- “La crimen de un dirigente político, cualquiera que sea su pensamiento. Puede originar una confusión de violencia si no Controlamossi nos dejamos satisfacer el corazón de la venganzadel convencionalismo y del odio”, sostuvo Petro a posteriori de desear la recuperación a Uribe, que fue sometido a una intervención quirúrgica.
El propio presidente denunció que narcotraficantes colombianos y extranjeros que viven en Dubái intentaron asesinarlo recientemente con cohetes.
En 2002, el expresidente Álvaro Uribe, comienzo del partido al que pertenece Miguel Uribesalió ileso de un ataque con explosivos perpetrado por la entonces grupo de las FARC para evitar su mejora a la Presidencia. En su carrera, el exmandatario asegura que escapó a 15 atentados.