
El presidente de la República, Luis Abinadery los expresidentes Hipólito Mejía, Danilo Medina y Leonel Fernández, buscan salida a la Crisis haitiana y su repercusión en el país con la reunión esta tarde con el Consejo Crematístico y Social (CES).
Esta reunión, que se realizará en la Biblioteca Franquista Pedro Henríquez Ureñaestará enfocada en la búsqueda de un consenso doméstico en torno a la problemática haitiana y otros temas de interés.
Encima estarán Rafael Toribiopresidente del CES, el ministro de Defensa, teniente universal Carlos Antonio Fernández Onofreel ministro de la Presidencia, José Ignacio Palizael director de Migración, vicealmirante Luis Rafael Lee Ballesterel Canciller Roberto Álvarez y otros.
Los temas a tratar serán migración, comercio doble, crecimiento de comunidades fronterizas, seguridad doméstico, relaciones internacionales y asuntos laborales.
El Gobierno y los expresidentes analizarán el contexto del Haití, el cual se observa rebasado por la inseguridad social, económica y política, fruto del avance de las bandas criminales, que ya controlan gran parte de su zona, incluyendo en su hacienda Puerto Príncipe.
Las tensiones entre la República Dominicana y Haití se han intensificado en las últimas semanas, cuando el gobierno haitiano acusó a su vecino país de agravar su crisis interna a través del tráfico de armas.
A esto, el presidente Abinader respondió: “Haití debe enredar su problema y dejar de echarles la delito a otros países. Nosotros lo que estamos en convocar la atención a los problemas que tienen”.
Abinader y los tres exmandatarios, en una primera reunión el 14 de mayo pasado, coincidieron en que la situación de inestabilidad en Haití representa una amenaza no solo para su propia población, sino igualmente para toda la región, sobre todo para la República Dominicana.
Los cuatro políticos reafirmaron la “requisito” de aplicar la ley migratoria con “firmeza” y respeto a los derechos humanos, a través de los operativos de apresamiento y deportación de haitianos indocumentados.
El Gobierno dispuso en octubre pasado un masivo software de deportaciones y ha fortalecido los controles fronterizos con una verja que construye en la frontera, la utilización de equipos de tecnología destacamento y el despliegue de miles de tropas.
Asimismo, ha endurecido las medidas en el plano interno con decisiones como las de deportar a los haitianos indocumentados que acudan a centros de salubridad públicos.