
Italia necesitará más de 2,7 millones de empleados domésticos en 2028 para cubrir la creciente demanda de subvención en los hogares, según la Asociación Sindical Doméstico de Empleadores de Hogar (Assindatcolf), que pide al Gobierno italiano que permita la entrada de más trabajadores extracomunitarios.
En total, las familias italianas emplearán a 2,74 millones trabajadores del hogar, entre regulares e irregulares, de los cuales 660.000 serán italianos y 1.414.000 extranjeros, según un referencia publicado este lunes por Assindatcolf y el Centro de Estudios IDOS, con motivo del Día Internacional del Trabajo Doméstico.
Las regiones con maduro carencia serán Lombardía (septentrión), Marchito (centro), Campania (sur) y Véneto (septentrión), donde se concentrará la maduro parte del refuerzo anual requerido
El referencia, titulado “Family (Net) Work – Laboratorio sobre casa, tribu y trabajo doméstico”, advierte de que la demanda aumentará en más de 86.000 trabajadores respecto a 2025, lo que implica un refuerzo anual de unas 28.574 personas entre 2026 y 2028.
De ese incremento, solo 8.729 serán italianos, mientras que los otros 19.845 serán extranjeros.
Entre ellos habrá 14.471 que no pertenecerán a la Unión Europea (UE), y que supondrán el 73 % de los nuevos trabajadores foráneos y más del 50 % del total adicional previsto.
Las asociaciones sindicales consideran a los trabajadores extracomunitarios un factótum “esencia” para cubrir la demanda adicional y reclaman que su presentación al país “se organice con anticipación».
Por este motivo, solicitan al Gobierno de la primera ministra italiana, la ultraderechista Giorgia Meloni, que los Decretos de Flujos, el único utensilio constitucional en Italia para la entrada regular de ciudadanos no comunitarios por motivos de trabajo, reserven una cuota mínima anual de 14.500 trabajadores para el sector doméstico y de cuidados en el trienio 2026-2028.