Las críticas contra la Sucursal del presidente Donald Trump por desplegar miembros de la Urbano Doméstico en Los Ángeles sin la autorización del representante de California, Gavin Newsom, arreciaron este domingo, cuando supone la primera vez en 60 abriles que el Ejecutor estadounidense impone esta orden a su discreción.

Trump anunció el despliegue de 2.000 soldados de la Urbano Doméstico de California para, según él, contrarrestar manifestaciones focalizadas, que ya fueron controladas y no representaban ningún problema de seguridad, contra las redadas migratorias en Los Ángeles, el condado más poblado de Estados Unidos con cerca de 10 millones de habitantes.

Por el contrario, los defensores de los derechos civiles han listo que la atrevimiento del Gobierno Trump representa “una amenaza” para la metrópoli.

“Esta es una peligrosa ascenso que pone en aventura a las comunidades estadounidenses y a nuestra democracia”, dijo este domingo en un comunicado Neera Tanden, directora ejecutiva del Centro para el Progreso Yanqui.

Tanden advirtió que la atrevimiento de Trump pesquisa exacerbar las tensiones, en contravía de la seguridad de los californianos.

Esta es la primera vez en 60 abriles que un presidente estadounidense despliega la Urbano Doméstico de cualquier estado sin contar con la autorización del representante a cargo, que es el comandante en dirigente de las fuerzas militares estatales.

La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) condenó desde ayer el despliegue de las tropas y dijo que estudia imponer una demanda.

La compañía republicana tomó la atrevimiento a pesar de que funcionarios electos, la Policía y el alguacil de Los Ángeles confirmaron que las protestas, que en su mayoría se mantuvieron pacíficas, estaban contenidas.

La anciano queja de Trump es el “supuesto” daño del edificio federal que alberga la calabozo migratoria de Los Ángeles, que este domingo luce con grafitis contra el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).

La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, dijo este domingo en un comunicado que el despliegue de las tropas, que se ubicaron esta mañana frente al edificio federal de Los Ángeles, “es una ascenso caótica”.

“El miedo que siente la masa en nuestra ciudad ahora mismo (por los soldados) es muy vivo; se siente en nuestras comunidades y en nuestras familias, y pone en aventura nuestros vecindarios. Esto es lo postrero que nuestra ciudad necesita”, agregó la alcaldesa demócrata.

Tom Homan, el conocido como ‘zar de la frontera’ designado por Trump, amenazó hoy con arrestar a Bass y Newsom, «si se exceden» en sus competencias sobre el despliegue de soldados, en la que negó la afirmación previa del representante demócrata de que la Sucursal Trump estaba creando un «espectáculo”.

Para el historiador Miguel Tinker Salas, las amenazas de Homan hacen parte del show mediático con el que se pretende “desestabilizar” a California, según dijo a EFE.

El catedrático de Pomona College advierte que Homan no tiene ninguna autoridad para ordenar un arresto de estos funcionarios electos.

Hina Shamsi, directora del Plan de Seguridad Doméstico de ACLU, además acusó a la Sucursal de producir un aventura “lícito y ético” para las tropas “socavando imprudentemente” el principio demócrata de que las fuerzas armadas no deben custodiar a los ciudadanos.

Este domingo, una veintena de soldados de la Urbano Doméstico de California, la mayoría con apellidos hispanos, cuidaban uno de los garajes de camino al confuso federal, que incluye la calabozo de inmigración de ICE en el centro de la ciudad.

El camino al espacio conocido adentro del confuso de edificios federales no estaba cerrado al conocido, lo que permitió a activistas mostrar su apoyo a los detenidos que golpeaban las ventanas para confirmar que escuchaban los cánticos de respaldo.

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