
Por Abril Peña
585 niñas menores de 14 primaveras dieron a luz en República Dominicana. Lo dice el más nuevo referencia del Anuario de Estadísticas Vitales de la Oficina Franquista de Estadística.
Y la gran pregunta es:
¿Dónde están las 585 personas investigadas por esos embarazos?
Porque, a menos que esos partos hayan sido causados por niños de la misma época —y aún así la ley es clara—, estamos hablando de violaciones.
Una pupila de 10 primaveras no tiene capacidad lícito de consentir. Y aun si el asaltante incluso es pequeño, siquiera hay capacidad de consentimiento.
Aquí lo que hay es una sigla monstruosa de abusos sexuales normalizados, archivados, silenciados.
¿Dónde está el Estado?
El Profesión Sabido no ha dicho falta. El Profesión de Lozanía Pública siquiera., mucho menos el Servicio Franquista de Lozanía, Procuraduría y Conani.
No hay alertas, no hay investigaciones masivas, no hay operativos especiales, no hay ruedas de prensa.
585 niñas parieron. Punto. Y ya.
Y eso, en cualquier país con dignidad institucional, sería un escándalo de Estado.
Pero aquí, no. Aquí se sigue funcionando como si esto fuera parte del paisaje.
Como si el apuro inmaduro fuera una “circunstancia social” y no una evidencia directa de violencia sexual contra menores.
Esto no se debe a la pobreza La pobreza puede ser un entorno de vulnerabilidad, sí. Pero la pobreza no viola a nadie. Lo hacen hombres, muchas veces adultos. Lo hacen familiares, vecinos, conocidos, parejas forzadas.
Y lo permite el silencio de las autoridades, la errata de imparcialidad, y un sistema que prefiere atender el parto antaño que investigar el crimen.
Un país con estos titulares no puede seguir funcionando igual En un país donde 585 niñas dan a luz y no hay 585 investigaciones abiertas, donde no hay un solo fiscal dando explicaciones, donde la sociedad ni siquiera se inmuta… ese país ha dejado de proteger a sus niñas.
Y si eso no levanta alarmas, si eso no provoca un paro institucional, si eso no hace temblar a quienes deben avalar imparcialidad… entonces, como muchos dicen ya sin ironía, ese país debería cerrarse.