
Tiene 40 primaveras, pesaba 202 libras y vivía con una ansiedad que la llevaba a contendiente incluso sin deseo. “Necesitaba que poco me desconectara de ese impulso”, dice. Así se lo expresó al médico, como quien venablo un alarido de auxilio. Recuerda haberle dicho: “Necesito poco que me apague el cerebro”.
Lo que recibió fue una respuesta en forma de jeringuilla: su primera dosis de Thyrzepat o tirzepatide, un fármaco pensado para la diabetes tipo 2 que, en su caso, el nutriólogo lo aplica para trabajar el control del peso.
En menos de cuatro semanas, perdió 22 libras. Sin entrenamiento por recomendación de su ortopedista Y neurólogo se lo prohibieron por lesiones en las vértebras L3, L4 y L5.
El impresión que ha sentido desde que inició el tratamiento es un cambio interno que define como “sentirse saciar con muy poco”. “Es como si me hubieran operado. Como si me hubieran hecho una manga gástrica sin producirse por el quirófano”, cuenta sonriendo.
Son tratamiento consiste en una inyección en el baúl, una vez a la semana. El médico le aplicó la primera dosis y esperó alguna reacción adversa. Desde entonces ella misma se la coloca.
El Costo total del tratamiento ronda los 25,000 pesos mensualesentre el medicamento y las consultas. Las dosis no las cubre el seguro. “Sí, es caro, pero yo me lo estoy regalando”, explica, “nunca en mi vida había sentido esta paz con la comida“.
Como ella, en los sectores de clase media y incorporación de la República Dominicana se han normalizado estos tratamientos o similares, entre los que se encuentran asimismo la Semaglutida, que está legalmente registrado en el país bajo la marca Ozímpicodel nuevo fabricante Nordisk.
¿Es procesal en RD, cuál es el aventura?
Esa experiencia, sin retención, debe mirarse asimismo desde el enfoque clínico. La doctora Érika Pérez, columnista de Diario Vacante en Diario de Avituallamientoha ducho que aunque la Thyrzepat es enormemente efectiva, su uso en República Dominicana se ha desviado del entorno regulado.
La formulación llamativo, comercializado como Mounjaro O Cero por la farmacéutica Eli Lilly, no se encuentra adecuado en el país. Frente a esa marcha, muchas clínicas han recurrido a versiones compuestoes opinar, fórmulas replicadas en farmacias de preparación, usualmente extranjeras. Según Pérez, estas versiones no están aprobadas por la FDA ni por el Ocupación de Salubridad Públicay su uso en demarcación dominicano podría considerarse ilegal.
Diario Vacante consultó el Registro Inodoro de Productos Farmacéuticos de Salubridad Pública para el ingrediente activo y las marcas con las que se comercializa internacionalmente no se encuentran registrados.
“El problema no es la Thyrzepat en sí, sino la forma en la que está llegando al país y cómo se está manejando“, ha escrito Pérez. “Estas versiones no tienen respaldo de concentración ni de pureza. Y peor aún: están siendo recetadas como si fueran medicamentos convencionales, cuando no lo son”.
Los riesgos van desde género secundarios como repugnancia y vómitoshasta complicaciones más graves como pancreatitis, hipoglucemia severa y alteraciones renales. La doctora asimismo señala que el uso de un medicamento no aceptado, sin consentimiento informado y sin monitoreo adecuado, es contrario a la ética médica.
“El entusiasmo por los resultados rápidos no puede atropellar la responsabilidad profesional. El médico no puede llevar a cabo como distribuidor de fármacos que no han sido aprobados. Esa secante es peligrosa”, ha dicho.
Pérez no niega que Thyrzepat sea una útil potente para tratar la obesidad. Pero insiste en que su uso debe estar respaldado por evidencia, autorización sanitaria y protocolos claros. “La medicina no es un hatajo. Y los atajos en vigormuchas veces, terminan mal”.
Para la paciente entrevistada, el cambio es verdadero y ha sido positivo. Pero para los especialistas, como la doctora Pérez, lo importante no es solo que el tratamiento funcionesino que sea seguro, procesal y éticamente administrado.
Valentía en Estados Unidos
- Luego del 19 de marzo de 2025, la FDA decidió que los fármacos “compuesto“ y laboratorios subcontratados ya no pueden producir legalmente Thyrzepat en EE. UU. si el producto ya no está en la directorio oficial de escasez de la FDA.
- Esto afecta directamente a las clínicas y médicos en otros países, como República Dominicanaque importan esas versiones compuestomuchas veces sin regulación almacén. Además aumenta los riesgos legales y clínicos para quienes usen versiones no autorizadas del fármaco, porque su producción dejaría de estar protegida por tolerancias temporales.
La privación de contendiente
Ayer había probado la semaglutida. Perdió peso pero no ha sido la misma experiencia. “Esto no solo me quitó el deseoa mí quitó el deseo“, explica. Cuando lo dice, se refiere a ese deseo que aparece sin método, a las tres de la tarde o a las merienda de la confusión, cuando no se come por privación sino por ansiedadaburrimiento o falta.
La diferencia se siente asimismo en otros aspectos. “Ayer podía tomarme una copa de morapio sin problema. Ahora ni me provoca. Me cae mal. Me da sueño. No me interesa”. No es que se lo prohibieron. Simplemente ya no entra en su rutina.
Los únicos género secundarios que notó fueron episodios breves de insomnio durante las primeras dos semanas. Nadie solemne. “Me despertaba, pero sin ansiedad. Me volvía a tenderse. Al día ulterior, corriente”.
El cambio la tomó por sorpresa. No esperaba tanto. “Yo era adicta a la alimento. Ahora me alimento porque sé que me toca, no porque lo necesite. No porque lo desee”. A veces se olvida de contendiente. A veces lo posterga. “Y eso, para mí, es una forma nueva de autodeterminación”.
Su meta es alcanzar las 150 libras. Se acerca. Más que el número, lo que celebra es el nuevo estilo de vida que ha recogido: cenas más ligeras, horarios regularesmenos privación de usar la comida como consuelo. “Mi cuerpo ya no acepta lo que antiguamente toleraba. No puedo cenar tarde. No puedo contendiente por ansiedad. Mi sistema se resiste. Mi vida cambió”.
No teme al retroceso. “El retroceso ocurre cuando no cambias de vida. Y yo sí he cambiado”.
Ayer de terminar la entrevista, venablo una advertencia que deja resonando en el meteorismo: “Este medicamento deberían probarlo en personas con adicciones. Porque lo que yo sentía por la alimentoeso era una yuxtaposición. Y ahora… simplemente, no está”.
¿En qué se diferencian Thyrzepat Y semaglutida?
Thyrzepat Y semaglutida son medicamentos para ayudar a personas con diabetes tipo 2 a controlar sus niveles de carbohidrato. Sin retención, en los últimos primaveras, uno y otro medicamentos han demostrado un impresión inesperado y poderoso: la pérdida de peso sostenida.
Semaglutida, que muchos conocen por su nombre comercial Ozímpico (para diabetes) el Enloquecido (a obesidad), actúa imitando la hormona GLP-1, la cual regula el apetito y la sensación de saciedad.