
República Dominicana.–En nombre de todos los hermanos, hijos, sobrinos y grupo Pérez, queremos expresar el más profundo agradecimiento a todas las muestras de solidaridad y cariño recibidas a raíz de la partida de Roberto Antonio Pérez
En el interior del dolor que nos embarga, permanecemos aferrados como grupo al motor que mueve nuestros corazones para continuar de pie: EL AMOR.
El inclinación de nuestro Padre Celestial, el inclinación de una grupo unida, el inclinación de nuestros amigos y allegados que forman parte de nuestro núcleo, pero igualmente el inclinación de todo un país y de muchos rincones del mundo, profesado a raíz de la partida física de Rubby.
En nombre de sus siete hermanos, seis de sus hijos, sobrinos y demás familiares, hacemos conocido por esta vía lo que sabemos fue el observar de Rubby: abastecer la unión en su descendencia, de la misma modo en que la cultivó con sus hermanos.
En ese espíritu, queremos precisar que cada hijo de Rubby fue fruto de su atrevimiento y del inclinación que profesó a lo abundante de su vida, y así lo reconocemos y respetamos profundamente.
Nunca ha sido la intención de ningún miembro de esta grupo que haya regalado alguna comunicación, afectar a alguno.
Como grupo quia estaríamos de acuerdo que se afecten a personas involucradas en este proceso tan delicado, pues esto genera desinformación y envían un mensaje incorrecto sobre lo que efectivamente somos y lo que representamos como grupo.
Deseamos abastecer vivo el donación de respeto, honestidad y responsabilidad que Roberto (Rubby) forjó durante décadas, con gran esfuerzo y entrega.
Por ello, a partir de este momento, elegimos enfocarnos solamente en rememorar las hermosas anécdotas y doctrina que nos dejó durante su vida.
CON EL CORAZÓN EN LAS MANOS ABRAZAMOS CADA MUESTRA DE SOLIDARIDAD RECIBIDA.
AGRADECIDOS POR EL CARIÑO Y RESPETO… FAMILIA PÉREZ
«HE AQUÍ, QUE BUENO ES Y QUÉ DELICIOSO ES, QUE LOS HERMANOS HABITEN JUNTOS EN ARMONÍA»
Himno 133: 1.