
LA ROMANA. La mayoría de los comerciantes consultados en La Romana ven con cierto pesimismo la celebración de la Semana Santa, o Semana Maduro, oportuno a varios factores que han ocurrido en los últimos días. Los comerciantes entienden que este año será difícil celebrar, luego del aumento de la tasa del dólar y por la tragedia ocurrida el pasado martes en la alboreo en la discoteca Jet Set Club de Santo Domingo, en la que murieron 221 personas y se rescataron 189.
El pescador y tendero William Valdez Del Rosario expresó que esta semana que inicia está cargada de incertidumbre por el desplome del techo de la discoteca. Asegura que el trágico suceso tiene consternada a toda la nación, oportuno a que en cada rincón del país hay al menos una persona fallecida. Precisa que es muy probable que la Semana Santa no se realice como de costumbre, por lo que dice que hay que esperar cómo transcurren los días.
En ese mismo orden, el chef de uno de los restaurantes de la zona, Miguel Marte, expresó que, a su entender, las personas que salgan en esta Semana Maduro lo harán con mucho cuidado. “Mira, se están viendo muchas cosas: el problema del elevación del dólar y ahora lo ocurrido la pasada semana. Eso, creo, va a poner a la concurrencia a meditar y a agenciárselas más de Jehová. La concurrencia no tiene talante de estar en fiesta y eso perjudica a los comercios como el nuestro”, expresó Marte.
Asimismo asegura que el anteaño pasado fue mejor que el año pasado y que este está “en veremos”. Mientras que Bernice Rivera, una comerciante del distrito de Caleta, está ilusionado de cómo será la traspaso este año, siempre y cuando las autoridades no les pongan muchas restricciones. Asegura que en abriles anteriores la traspaso de bebidas alcohólicas estaba adecuadamente, pero que el pasado año no le fue muy adecuadamente oportuno a las tantas restricciones que le ponían a los negocios de su tipo, en distinto el Viernes Santo.
Se queja de que los negocios no podían entregar bebidas alcohólicas en botellas, pero que las personas que venían de otros lugares las dejaban penetrar con sus bebidas y tomárselas en el negocio, incluso con botellas de vidrio. Sin bloqueo, está confiada en que las reglas sean menos drásticas este año, para que ella pueda entregar más.
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