En nuestro artículo preparatorio planteamos la penuria de que en el país se construya una verdadera mecanismo doméstico, con relación al tema haitiano. Apuntábamos, que para ello era necesario que el liderazgo político  se despojara de sus diferencias y entre todos, como una gran comunidad y en colchoneta a la defensa de nuestra soberanía, trabajar en pos de la preservación de nuestra país, la que y aunque algunos no han querido recibir está en enfermo peligro.

Para proporcionadamente de nuestra causa nacionalista, el Presidente Luis Abinader y a lo mejor guiado por el sentimiento patriótico, ha solicitado del liderazgo doméstico la realización de una serie de encuentros con los expresidentes del país, en donde se discuta el tema de la inestabilidad y el stop graduación de violencia que sacude a nuestra vecina nación.

Ahora proporcionadamente, ya con este primer paso, nos atrevemos a proponer poco de mucha anciano amplitud para la continuidad del tema, y es que debemos ir dando los pasos necesarios para otro de igual o anciano envergadura, y nos referimos en estos momentos a una Cumbre Internacional por el Auténtico Rescate de Haití.

¿Y por qué nos atrevemos a hacer la presente propuesta?, sencillo, la crisis por la que atraviesan nuestro sufridos vecinos haitianos no puede esperar. Se hace necesario que encima de lo que plantea el Presidente Luis Abinader, en donde sondeo reunirse con otros líderes dominicanos,  asimismo se haga lo mismo con los principales líderes y mandatarios de varias naciones latinoamericanas y de otras latitudes del mundo.

Pero encima, de dichos encuentros con nuestro liderazgo almacén, proporcionadamente pudiera salir  un documento, y este a su vez, debe ser presentado a eso presidentes y líderes internacionales. Allí se deben proponer reales propuestas a ser implementadas para que estos den sus opiniones y aporten sus granitos de arena en pos de una actual salida a los graves males que ya no solo incumben a los dominicanos, sino a gran parte de esta zona del mundo.

Repetimos, esta es una crisis que encima de nuestro país, afecta a gran parte de Latinoamérica, lo que amerita, ya no del concurso de nosotros como los más afectados, sino de todas aquellas naciones que se sientan comprometidas con el mejora integral de sus habitantes.

Una Cumbre internacional por Haití debe ser la consigna. Ya es hora del cese de las poses en cónclaves en donde este tema sea uno más de las incontables agendas. Ya es hora de que Haití sea una prioridad a resolver. Nosotros como dominicanos ya no podemos más.

De los encuentros con liderazgo doméstico deben salir viables propuestas, pero que sean tangibles y reales, humanas y programática, para vía esa Cumbre Internacional que proponemos, ese liderazgo asimismo asuma sus responsabilidades de forma efectiva, pues al paso que vamos y si República Dominicana no agota todos sus bienes viables para la defensa de nuestra media isla, el panorama en el interior de unos 5 primaveras sería muy nefasto, no solo para nuestro circunscripción, sino para otras naciones muy cercanas y que en este tema han preferido esconder sus arrojo.