
Por: Ling Almánzar
Cuatro semanas bastaron para que lo destronaran como presidente efímero del Instituto Duartianochoque que el doctor Julio Rodríguez Grullón atribuye a una conjura orquestada por su antecesor y incluso sucesor, el doctor Wilson Gómez Ramírez.
Sin confiscación, Gómez se defiende de análogo incriminación alegando dos cosas: primero, que fue él quien limitó su mandato al frente de la entidad; y segundo, que fue él quien auspició y propuso al Dr. Rodríguez Grullón como su sucesor en el cargo.
Entrevistado en el software “Hoy mismo”, Gómez achacó la destitución de Rodríguez Grullón a la nueva posición que este asumió en relación con el tema haitiano. Reveló que el nuevo -y destronado- presidente propuso que se tomara una partida del Presupuesto Franquista para destinárselo a Haitípues República Dominicana estaba más desarrollada que ese país y podía ayudarlo.
A Gómez y otros dirigentes duartianos, esa posición era sorprendente y escandalosa, puesto que Rodríguez Grullón nunca la había manifestado en sabido y tenía, adicionalmente, que ceñirse a la límite clásica y nacionalista del Instituto Duartiano.
Frente a esa postura sorprendente, los dirigentes le sugirieron a Rodríguez Grullón que se retractara en sabido, dándole un molinete a sus declaraciones iniciales. La situación era salvable: se podía remediar. Solo bastaba una retractación, un alegato de manipulación por parte de ciertos sectores.
Pero Rodríguez Grullón es un hombre intransigente y de pies firmes. Luego, dijo que no se iba a retractar. Entonces, que renuncie… Siquiera. Ni una cosa, ni la otra. En sinceridad, lo que más roncha causó su postura fue el momento: eran los días febriles y candentes de la marcha alrededor de Se asustó.
“Es un hombre de mucha firmeza en lo que él considera: no echa para detrás; no cedió y no iba a ceder, radicalmente”, ha dicho Wilson Gómez.
A pesar de todo, él está convencido de que su camarada Rodríguez Grullón no merecía el escándalo que se desató. Pero ya sucedió…
RD, amenazada
Wilson Gómezexmagistrado del Tribunal Constitucional, reitera que la comunidad internacional quiere crear una crisis o confrontación en la isla.
“A nadie le conviene que se produzca una situación de inestabilidad en la República dominicano; podemos perder todos, y se puede hacer tarde si no hay una autos rápida, si no hay una mecanismo doméstico, en torno a esa problemática”.