

El autor es economista. Reside en Santo Domingo
El turismo dominicano continua en la mira de sus competidores más cercanos. No paran de propagar estupideces con fines de desprestigiar nuestro pais y los altos ranking de los complejos turísticos más exclusivos de todo el caribe.
Por ejemplo, un crónica de Radical Storage del 2025, una de esas redes turísticas que quizás necesita poco más para sostenerse, dice que Punta Cana ocupa el tercer circunscripción entre las ciudades «más decepcionantes» del mundo para los turistas, solo superada por Cancún.
Pero vean ahora los datos para demorar a esa estúpida conclusión.
“El estudio, basado en 97,409 reseñas de viajeros en 100 destinos turísticos, reveló que un 11.9 % de las opiniones sobre Punta Cana contienen comentarios negativos, un porcentaje que evidencia una aprobación de 88.9%”
Oigan adecuadamente, una aprobación de 88.9% y aun así deje de ser uno de los lugares más decepcionante. Definitivamente y en colchoneta a esta estúpida conclusión debemos promover el “decepcionismo” para atraer más turistas porque poseemos la más incorporación ocupación hotelera de la cuenca del Caribe.
En el enrevesado Punta Cana-Bávaro, Cap Cana, la Romana y Bayahibe la ocupación hotelera estuvo sobre el 90% en el 2024 y México con 85%. ¿Qué hoteles logran una ocupación de esta magnitud en cualquier circunscripción del mundo? Muy pocos.
A esa basura propagandista no hay que hacerle caso a pesar de que hacen daño y buscan descomponer nuestro turismo.

Especulaciones
Por otra parte, es tiempo de dejar las especulaciones sobre el derrumbe del techo de la discoteca Jet Set por respeto a los fallecidos y heridos en ese trágico azar. Ya se deje hasta de una munición colocada para eliminar a ciertas personas lo que parece insensato y fuera d contexto.
Según algunos babosos en las redes sociales, resulta que la centro de los grandes empresarios dominicanos están implicada en ese desastre por su vinculación como socios en varias empresas del señor Antonio Espaillat. El problema no es la emisora X o el restaurant Y. El problema es la discoteca Jet Set, donde todo parece indicar que su único dueño era el señor Espaillat, quien ya se puso a la disposición de la razón.
Las demandas lloverán y Espaillat tendrá que replicar no solo con lo que queda del Jet Set sino con todas las acciones y posesiones que posea, lo que será determinado por la razón. Todo saldrá a la luz a su correcto tiempo, incluyendo las causas del azar.
Especulan incluso sobre el presidente Abinader, que intenta defender a Espaillat a través del Doctor Jorge Luis Polanco que coordinaba, ayer de su renuncia, el Equipo de Recuperación del Patrimonio Conocido, donde logró recibir miles de millones de pesos. Otra mentira dañina, perniciosa y de mentes enfermas, conociendo al presidente y viendo sus acertadas acciones y decisiones luego de la tragedia.
Si estuviera en los pantalones de Antonio Espaillat, buscaría los mejores abogados del pais para mi defensa y entre ellos está el doctor Jorge Luis Polanco.
Si un enemigo en serie llega gravemente herido a un hospital la obligación del médico es intentar salvarlo a toda costa y defender sus derechos mientras esta convaleciente. Asimismo los abogados tienen esa obligación con su defendido, sin importar cuan profundo es la denuncia.
Jpm-am
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